Regulación de productos cárnicos en Venezuela se convierte en prioridad

Venezuela evalúa una nueva revisión en los precios de la cadena cárnica, luego de que el 20% autorizado en mayo fuera insuficiente para compensar el rezago generado por la distorsión del control de precios, según ElUniversal.com.

En el punto de cuenta elaborado por los Ministerios de Alimentación, Agricultura, Comercio y Finanzas, se sugiere "un ajuste inmediato en el precio de regulación, a fin de garantizar una efectiva fiscalización de los precios, sin que se afecte el abastecimiento". 

Así, los Ministerios recomiendan que se incluyan dentro del control de precios los cortes cuyos precios no están regulados: solomo de cuerito, punta trasera y lomito, así como ser considerados cortes de primera. (Lea: ¿Quiénes se benefician con la escasez de cárnicos en Venezuela?)

Estiman que el hecho de que esos cortes de carne estén fuera de la regulación "promueve distorsiones en los precios".

La revisión que plantean en la cadena cárnica para corregir las distorsiones requiere fuertes ajustes en los precios.

Proponen un ajuste de 223% en el precios de los cortes de primera (chocozuela, pollo de res, pulpa negra, ganso, muchacho redondo y cuadrado), incluyendo los cortes parrilleros (punta, solomo y lomito), que pasarían de Bs 27,29 (US$4,34) el kilo a Bs 88,03 (US$14,04). 

El ajuste sería escalonado y se aplicaría un aumento de 50% sobre el precio actual en julio; un segundo ajuste de 45% en septiembre y 48% en noviembre, según el papel de trabajo. (Lea: Venezuela pone trabas a importación de carne, sin importar desabastecimiento)

Los cortes de segunda (solomo abierto, paleta, papelón, cogote, lagarto sin hueso, falda y chuleta) subirían 205% y los de tercera (lagarto con hueso, pecho y costilla) 90%, en la misma escala de tiempo.

La carne en canal (a nivel de mayorista) requiere un ajuste, según las estimaciones oficiales, de 161%, con lo cual el kilo pasaría de los Bs 17,23 (US$2,74) que cuesta actualmente a Bs 45,01 (US$7,15) en noviembre. (Lea: Colombia sigue estudiando mecanismos para enviar alimentos a Venezuela)

Fuentes del sector cárnico manifestaron su desacuerdo ante la intención de regular los únicos cortes que están fuera del control de precios, en vista de que son un respiro para distribuidores y detallistas, ante las pérdidas que genera la venta de la carne regulada.