¿Qué es la «revolución del pasto» que proponen en Argentina para producir 5 millones de toneladas de carne?

Fernando Canosa y Mateo Hopff, integrantes de la consultora Conocimiento Ganadero, escribieron en el periódico argentino La Nación que «con un mayor uso del forraje y el acompañamiento de otras tecnologías, el país puede dar un salto en la actividad ganadera».

Su planteamiento surge en medio de un escenario nacional e internacional particular: ante la mayor demanda de carne por parte de regiones como China y África, que hasta hace una década no figuraban como los mayores compradores, Argentina estaba creciendo en producción y logrando récords en peso promedio al sacrificio de 232 kg/cabeza.

No obstante, un tercer Fenómeno de La Niña ocasionó «una importante caída en la producción forrajera» que sin duda provocará una baja en el índice de preñez y, por consiguiente, de la oferta de terneros en 2024. En sus cálculos, el impacto de la sequía podría significar la pérdida de más de un millón de terneros el próximo año.

De acuerdo al trabajo de potencial de producción de carne vacuna realizado por la fundación, es posible alcanzar los 5 millones de toneladas si hay un aumento considerable de la producción y el uso del forraje producido del orden de 40 % más sobre la actual producción. «Para seguir creciendo es necesaria la revolución del pasto», afirmaron.

Para ello existe la tecnología pero debe implementarse de forma adecuada en las diferentes regiones para lograr este incremento. Los expertos hicieron referencia al Plan Balcarce en los años 70, que utilizó un crédito del Banco Mundial y la FAO con asistencia técnica del INTA. (Lea en CONtexto ganadero: Argentina está exportando más carne pero recibiendo menos dólares)

Con esta «alianza público-privada se logró aumentar la superficie de pasturas en un 120 %, incrementar la carga de vacas en un 40 %, lográndose a través de la alimentación, la sanidad y el manejo cambiar el perfil productivo de 35 partidos del centro sur de la provincia de Buenos Aires». La revolución del pasto incluye algunas de las siguientes estrategias:

• Mejora del manejo y aprovechamiento de los campos naturales.
• Incorporación de mayor área de pasturas perennes cultivadas.
• Mayor división de los potreros mediante boyeros eléctricos para lograr un mejor manejo.
• Incorporación creciente de fertilizantes para mayor desarrollo de las especies e incorporación de leguminosas en gramíneas puras para regenerar nitrógeno del ambiente.
• Gestionar el pastoreo mediante la planificación de una cadena forrajera a través del balance forrajero.
• Incremento en la cantidad de agua disponible para el ganado para mejorar el uso y manejo de los pastos.

Los resultados del estudio permiten proyectar que pueden producirse 10,6 millones de toneladas más de materia seca que implicaría un incremento de 1,2 millones de equivalentes vacas más, o sea un 15 % más de la carga actual. Al final se obtendría 5 millones de toneladas de carne alcanzando divisas de 10 mil millones de dólares y 200 mil puestos de trabajo adicionales.

Sin embargo, esto no solo se logra con «(…) la siembra de pasturas, sino (con) un paquete integral y diverso asociado a la realidad productiva de cada región y cada campo (que) traería aparejado el incremento del pasto necesario para el gran cambio en la producción de carne». (Lea en CONtexto ganadero: Crisis ganadera argentina se extendería incluso durante el 2023)

Pero además, esta mayor producción de carne es amigable con el medio ambiente, pues el análisis demostró que se puede secuestrar carbono a través del proceso natural de fotosíntesis de las pasturas, logrando capturar más de lo que emiten los rumiantes.

«Las tecnologías están disponibles para dar este gran paso, solo hace falta el gran cambio macroeconómico para retomar el camino del crecimiento por el bien de toda la Argentina y desarrollar en todo su esplendor la cadena de la carne vacuna, generadora de trabajo, arraigo y divisas a lo largo y a lo ancho de todo el país», remataron.