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Por CONtexto ganadero - 14 de Julio 2023
El manejo de la cría es un aspecto clave para el buen desempeño futuro del animal y entre los aspectos a cuidar están las instalaciones que deben ser adecuadas para evitarle problemas y enfermedades.
Existen diferentes alternativas del manejo de las crías siempre buscando su bienestar y teniendo todo el cuidado en la alimentación y en su salud, por lo que es indispensable seguir los protocolos veterinarios de desparasitaciones que diga el médico veterinario.
En el proceso de crianza de terneros deben considerarse diferentes aspectos como el alojamiento y el tipo y suministro de alimentación, señaló Ricardo Arenas, médico veterinario especialista, en un nuevo capítulo del Manual Práctico Ganadero, elaborado por Fedegán, donde indicó que existen opciones como la crianza libre en praderas donde incluso se mezclan con los animales adultos.
Este modelo es muy utilizado en el sistema de producción de cría donde el ternero permanece las 24 horas del día con su madre hasta el momento del destete. Tiene como desventaja que los ejemplares jóvenes se ven expuestos a enfermedades y parásitos propios de los animales adultos por lo que puede verse incrementada la mortalidad.
En el sistema de producción de doble propósito la cría está parcialmente con los animales adultos mientras se aparta para lograr el ordeño del día siguiente. Normalmente esto se realiza en un corral donde deben tener comida y bebida a voluntad.
En otras ocasiones se apartan los terneros lactantes en un potrero diferente y alejado de las madres. Sin embargo, este mecanismo tiene el inconveniente que los terneros y las madres buscarán más fácilmente reunirse dañando las cercas y con el riesgo de lesiones en los animales. (Lea: Estos son los 3 sistemas de crianza de terneros)
En ganadería de leche especializada la cría de los recién nacidos se hace artificialmente a partir del nacimiento cuando el animal es aislado de su madre para asegurarse que reciba el calostro y, posteriormente, el suministro de la leche sin que se generen daños en la ubre de la madre.
En estas ganaderías sí se hace el proceso de crianza en potrero. Este se realiza a las terneras de remplazo en lotes pequeños donde se tienen grupos de terneras por edades y allí se le suministra la leche y la alimentación, permitiendo que el animal esté en condiciones de potrero desde el primer día, teniendo acceso a pasto y agua a voluntad.
Al usar este modelo es importante que el potrero esté seco, bien drenado, con psato y tierno y agua limpia en abundancia, además de buena sombra y con suficiente cobertura de árboles para evitar vientos y cambios bruscos de temperatura.
Este tipo de crianza tiene el inconveniente que las terneras pueden mamarse entre sí y contaminar sus glándulas mamarias por lo que se dan casos de novillas que al primer parto llegan con mastitis.
Una opción muy utilizada en explotaciones de lechería especializada es la crianza en sala cunas, con divisiones individuales o en grupos y de forma abierta o cerrada, según el clima. Así se pueden alojar las crías desde el primer día hasta el final de la lactancia o incluso unos meses más. (Lea: ¿En qué consiste el sistema colectivo de crianza de terneros?)
Debe tenerse especial cuidado al momento de sacarlas al potrero pues suelen retrasarse en su crecimiento debido al cambio brusco de las condiciones del ambiente.
Este sistema presenta un alto costo de instalaciones, mano de obra por la labor de aseo de las divisiones y del material usado como cama. Así mismo, exige un alto cuidado sanitario para evitar enfermedades de contagio entre los animales que conviven de manera cercana.
Otra alternativa de crianza son las jaulas portátiles, construidas en madera o metal y con un techo que cubre el 50 % de la jaula. Tiene la ventaja que la cría se acostumbra desde el principio al ambiente del campo y soportan bajas temperaturas sin complicaciones pulmonares pues se pueden resguardar bajo techo durante las lluvias o el sol fuerte.
La jaula se debe mover diariamente permitiendo el pastoreo de la ternera manteniendo un piso seco y limpio y allí se le suminsitrará la leche y el suplemento de concentrado.
Una alternativa adicional, y quizás la más común en nuestro medio, es la crianza con el sistema de estaca o balde estaca. En este modelo los animales no disponen de ninguna construcción para protegerse del sol, lluvia, vientos y frío. (Lea: Siete pasos de la crianza y la recría que definen el potencial genético)
Sin embargo, los animales se desarrollan bien siempre que se muevan las estacas diariamente para permitir el pastoreo limpio y se le suministre adecuadamente la leche y concentrado diariamente.
Sea cual sea el modelo de manejo y las instalaciones de crianza que se tenga esta debe girar entorno al bienestar de los terneros y el desarrollo correcto de la cría.
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