Cuál es la temperatura de confort en bovinos

La temperatura de confort, también conocida como termoneutral, se refiere al rango de temperatura ambiental en el que los bovinos pueden mantener su temperatura corporal interna sin necesidad de activar mecanismos fisiológicos de enfriamiento o calentamiento. Fuera de este rango, los animales experimentan estrés calórico, lo que puede tener consecuencias significativas para su salud, bienestar y rendimiento productivo. (Lea en CONtexto ganadero: Es necesario controlar la temperatura de los animales)

Miguel Sánchez Flores, médico veterinario, explica que realmente, el ganado está más acostumbrado al frío que al calor, pues los animales cuentan con la temperatura de confort, “que es en donde el ganado se siente a gusto, puede producir bien, no pasa frío, pero tampoco calor”.

Para el profesional, esta temperatura de confort depende mucho de cada raza. Por ejemplo, la raza especializada en leche llamada holstein es de origen holandés, por lo tanto en dicho país mantienen temperaturas que van desde los 6 a los 18°C.

Por esto, el experto dice que “esta es la temperatura de confort de los holstein. Es decir, que estas vacas van a estar muy a gusto en ambientes que conserven estos grados centígrados mencionados anteriormente. Para el caso de los bovinos angus, que son de origen escocés, la temperatura promedio de dicho país es de 2 hasta los 15°C, por eso los bovinos se sienten tranquilos en ese rango de temperatura”.

En ese orden de ideas, ninguno de estos dos ejemplos superan los 20°C, lo que quiere decir que son animales que pueden difícilmente adaptarse a las temperaturas de países distintos a sus lugares de origen, pues la productividad y rendimiento no van a ser los mismos. Esto quiere decir que el rango puede variar según la raza, la edad, el estado fisiológico y las condiciones ambientales.

En estos rangos, los procesos metabólicos se desarrollan de manera óptima, permitiendo que los animales enfoquen su energía en actividades como la alimentación, la reproducción y la producción de leche o carne.

Cuando el ganado bovino supera su temperatura de confort, comienza a aparecer el estrés calórico debido a que “los animales ya no pueden disipar ese calor, lo cual afecta la salud y la producción de estos”, señala Sánchez Flores.

En el momento en que los bovinos se encuentran fuera de su zona de confort térmico, pueden experimentar estrés calórico. Cuando los bovinos tienen mucho calor tienden a disminuir el consumo de alimentos, lo cual repercute directamente en la producción de carne y leche.

Las producciones especializadas en leche son las más afectadas por este estrés calórico, pues este tipo de razas son las más susceptibles al calor. De acuerdo con Sánchez Flores, “aunque tengamos la mejor genética y alimentación, los resultados no serán los esperados porque si el ganado lechero tiene calor, no van a producir”.

Además, cuando se supera esta temperatura de confort por exceso de calor se ve afectada la reproducción porque el estrés calórico baja la tasa de gestación y se aumentan las absorciones embrionarias. (Lea en CONtexto ganadero: Estrategias contra el estrés calórico en la ganadería en esta temporada seca)