¿Cómo prevenir y tratar la listeriosis en vacas y otros rumiantes?

Esta enfermedad es causada por una infección con Listeria monocytogenes, que está diseminada por todo el mundo y se encuentra ampliamente distribuida en el medio ambiente. En rumiantes como los bovinos, ovinos o caprinos, suele provocar encefalitis, abortos y septicemia.

Según un artículo del Centro para la Seguridad Alimentaria y Salud Pública de la Universidad Estatal de Iowa y el Instituto de Cooperación Internacional de Biología, los rumiantes que sufren de listeriosis en la forma encefálica presentan inicialmente depresión y anorexia.

Le siguen síntomas neurológicos que pueden incluir parálisis facial con salivación profusa, marcha compulsiva en círculos, presión de la cabeza contra objetos, incoordinación, entre otros. (Lea: 5 datos sobre la listeriosis bovina en Colombia)

Los animales pueden presentar postración, y pueden realizar movimientos involuntarios de corrida o movimientos típicos de masticación. El curso de la enfermedad suele ser breve, entre uno y cuatro días en cabras y ovejas, y puede causar la muerte en uno o dos días.

La listeriosis es más crónica en bovinos. Los animales generalmente sobreviven de 4 a 14 días. Los abortos y las muertes fetales se producen principalmente en la última etapa de la gestación. La hembra no suele presentar otros signos clínicos, excepto fiebre y anorexia en algunos casos.

Si hay retención de placenta, el animal puede desarrollar metritis. La septicemia ocurre con mayor frecuencia en los neonatos y rumiantes jóvenes; los animales de mayor edad raras veces son afectados. Los síntomas típicos pueden incluir fiebre, depresión, falta de apetito y muerte.

El artículo añadió que se pueden observar infecciones localizadas, entre ellas, mastitis crónica, aguda o subclínica en el ganado bovino, en tanto que los ovinos pueden padecer de conjuntivitis. (Lea: ¿En qué momento abortan las vacas según la enfermedad que padecen?)

Tratamiento

La listeriosis se trata con antibióticos. Según la forma de la enfermedad, el tratamiento puede tomar hasta seis semanas o más. Debido a la ubicación intracelular de algunas bacterias, y a la incidencia de la enfermedad en pacientes debilitados la tasa de recuperación puede ser baja.

Prevención

En la mayoría de los casos, la prevención depende de la seguridad alimentaria. Como señaló este mismo centro en otro artículo, las bacterias de la listeria se encuentran en grandes cantidades en el medio ambiente en suelos, plantas, lodo, y arroyos.

Los animales generalmente se enferman al consumir ensilaje de maíz contaminado. El material ensilado de mala calidad con un pH elevado (bajo contenido ácido) se ha visto involucrado en la mayoría de los brotes debido a que la bacteria puede multiplicase en este ambiente.

Proporcionando ensilaje de buena calidad con un pH bajo (alto contenido de ácido) puede disminuir el riesgo de listeriosis en rumiantes. Evite ensilajes en mal estado y la capa superior (unos cuantos cm) que ha estado expuesto al aire.

Cualquier material ensilado sobrante deberá retirarse del comedero una vez que los animales hayan terminado de comer. De igual modo, los roedores deberán ser controlados. (Lea: Listeriosis bovina, un mal que puede estar en el silo de su predio)

Los animales enfermos deberán ser aislados del resto. Si una hembra aborta, será necesario eliminar de forma apropiada la placenta y el feto para evitar el contacto animal y humano. Al asistir a algún rumiante durante el parto, hay que usar guantes y lavarse las manos después de tocar a los animales. 

En las plantas procesadoras de leche y otros establecimientos, la pasteurización y en la prevención de la contaminación cruzada entre los productos procesados que abandonan la planta y las materias primas que ingresan a la misma permite evitar esta bacteria. 

Para evitar el contagio en humanos, se deben cocinar bien todos los alimentos, en especial la carne, lavando bien frutas y verduras, y evitando comer o beber productos lácteos no pasteurizados. Las mujeres embarazadas o las personas inmunodeprimidas deberán evitar los quesos suaves y las carnes frías.