Carne y derivados y leche derivados fue en lo que más gastaron los colombianos en 2024 en alimentos
Foto: pxfuel.comEl mayor gasto en alimentos de los colombianos durante 2024 fue en carne y sus derivados y leche y sus derivados.

Cargando...

Carne y leche, alimentos en los que más gastaron los colombianos en 2024

Por CONtexto ganadero - 27 de Enero 2025

El mayor gasto en alimentos de los colombianos durante 2024 fue en carne y sus derivados y leche y sus derivados.

Un informe que anualmente publica la Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI con la firma Raddar, muestra cómo fue ese comportamiento y otros aspectos como frecuencia y lugares de compra.


Al igual que en el 2023, las categorías de cárnicos y sus derivados y leche y sus derivados fueron las que representaron el mayor gasto de los hogares colombianos en el rubro de alimentos el año pasado.

Así lo señala el informe anual sobre el consumo de alimentos en los hogares colombianos, realizado por la Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI con la firma Raddar, en el que detalla el comportamiento del gasto durante el 2024.

El reporte muestra que el gasto en cárnicos y sus derivados fue de $43,52 billones (6,90 %) y la leche y sus derivados $22,04 billones (3,69 %). Después figuran los productos de panadería con $12,69 billones (1,97 %). Estas tres categorías representaron más de $78 billones.

El estudio aborda escenarios relacionados con la evolución del consumo, considerando factores económicos y analizando la proporción del gasto destinado a los alimentos de la canasta ANDI. (Lea en CONtexto ganadero: Colombianos destinaron $287,7 billones a la compra de alimentos en 2021)


Ingresos para alimentos


Los hogares colombianos destinaron el 38,30 % de sus ingresos a alimentos lo que representó un gasto promedio de $890.342 por hogar. En ciudades como Neiva (49,14 %), Barranquilla (44,04 %), Villavicencio (43,55%) y Cartagena (43,20 %) los hogares destinaron más ingresos a alimentos.

La variación anual promedio del 2024 (IPC anual promedio de enero a diciembre) en la canasta de alimentos para el hogar mostró un menor crecimiento (2,62 %) respecto a la inflación promedio del 2023 (14,67 %), Lo que permitió a los hogares recuperar poder adquisitivo en la canasta familiar.

Sin embargo, los precios de los alimentos desarrollados por la industria enfrentaron importantes retos en costos como el fenómeno de El Niño, los paros camioneros, la escasez internacional de algunas materias primas y el incremento del impuesto saludable al 15 %.


Lugares de compra


Al cierre de 2024, se registraron cambios en los lugares donde los hogares compran los alimentos. Las tiendas de barrio (49,3 %) vieron una disminución en su participación, mientras que los supermercados (23,7 %) y los formatos de Hard Discount (13,5 %) experimentaron un crecimiento. (Lea en CONtexto ganadero: Baja en precios de alimentos puede desestimular la producción nacional: SAC)

Este cambio también se reflejó en una menor frecuencia de visitas de los consumidores en los puntos de venta, junto con un incremento en las compras quincenales (27,7 %) y compras de 2 a 3 veces por semana (16,4 %).

Es importante resaltar que este comportamiento podría estar relacionado con la desaceleración de los precios, lo que permitió a los consumidores adquirir mayores volúmenes de alimentos en una sola visita a los canales.

En cuanto a los motivos de compra, para los hogares de ingresos bajos y medios, la necesidad continuó siendo el principal factor para la adquisición de alimentos. En cambio, en los hogares de ingresos altos, la calidad se consolidó como el principal factor, con un aumento cercano a 8 puntos porcentuales en su participación.

Este cambio se relaciona con el crecimiento de los supermercados como canales de compra, así como con el crecimiento del grupo de consumidores más informados que comenzaron a priorizar productos con mayores beneficios, más allá de cubrir sus necesidades básicas. (Lea en CONtexto ganadero: El consumidor compra por presupuesto y no por precio: Raddar)

Por otro lado, la costumbre también se destacó como un motivo clave de compra, especialmente en los hogares de ingresos bajos y medios. Este factor podría estar contribuyendo a una demanda más constante y a la recuperación del gasto en el sector.

“Conocer el comportamiento del gasto de los hogares es clave para diseñar estrategias que respondan a los requerimientos cambiantes de los consumidores. En 2025, aunque se espera una inflación controlada en alimentos, se debe estar atento a los desafíos como el aumento del impuesto saludable, la incertidumbre nacional, los cambios geopolíticos y la incidencia del clima que exigirán a la industria adaptarse rápidamente”, señaló Camilo Montes, director ejecutivo de la Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI.

Estas estrategias incluirán ajustar portafolios, optimizar cadenas de suministro y fortalecer la relación con los consumidores, garantizando competitividad en un entorno cambiante, concluyó.