Analizan grado de fragilidad de cafetales ante el cambio climático

Con un estudio que realizan la UDCA y la Gobernación de Cundinamarca, se espera establecer el grado de vulnerabilidad de los cafetales al cambio climático.

En el departamento de Cundinamarca se lleva a cabo un diagnóstico integral de ecosistemas cafeteros en los municipios de Tibacuy, San Juan de Rioseco y Pacho para determinar su grado de vulnerabilidad al cambio climático. Para ello se destinaron $3.287 millones provenientes del Sistema General de Regalías, SGR.

En esta iniciativa participan la Secretaría de Ciencia y Tecnología del departamento, CTel; la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales, UDCA; la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca; y la Corporación Latinoamericana Misión Rural.

También se desarrollarán actividades que sensibilicen a la comunidad cafetera sobre la importancia de los sistemas sostenibles de producción agropecuaria. (Lea: Fortalecer la competitividad, el reto de los cafeteros en 2015)

El proyecto es parte de la línea estratégica de Innovación Rural de la Secretaría de Ciencia y Tecnología de Cundinamarca, y se encuentra en ejecución hace más de 1 año en 3 los municipios con vocación cafetera: Tibacuy, San Juan de Rioseco y Pacho. Esta iniciativa está prevista para realizarse en 2 años.

“Este proyecto es una apuesta del Gobernador (Álvaro Cruz), para diagnosticar no solo las fincas cafeteras del departamento sino para generar una serie de recomendaciones para que las comunidades entiendan la importancia de tener Buenas Prácticas Agrícolas para la adaptación al cambio climático”, informó el secretario encargado de CTeI, Luis Fernando Ayala Pabón.

La idea es estudiar 3 tipos de ecosistemas cafeteros: sombra, semisombra y sol. Dentro de los primeros hallazgos, se destacan los estudios de plagas y enfermedades, especies arbóreas asociadas al café, presencia de aves en los cafetales, fijación y almacenamiento de carbono, química, biología y erosión de suelos y una caracterización socioeconómica de los territorios.

Sobre el tema, Carlos Armando Uribe, gerente Técnico de la Federación Nacional de Cafeteros, FNC, en diálogo con CONtexto ganadero señaló que en las diferentes regiones el gremio cuenta con técnicos especializados que les indican a los productores la cantidad de árboles que pueden sembrar, teniendo en cuenta factores como la luz solar, pluviosidad, humedad, entre otros. (Lea. “Urge política que haga sostenible el negocio del café”, Asoexport)

“La gente también puede consultar con los técnicos este tipo de temas, todo en aras de mantener la productividad del café. Nosotros les decimos a los caficultores cómo pueden sembrar y cuándo es necesario fertilizar. Pero para que todo ello sea posible, es necesario conocer el clima de la zona y en la FNC le podemos ayudar al productor”, aseguró Uribe.

El vocero de la FNC también aseguró que Colombia necesita renovar cierta cantidad de hectáreas de árboles de café para mantener la producción del grano.

“Las áreas que debe renovar el país en los próximos 5 años corresponde a 350 mil hectáreas, es decir 70 mil cada año. De esa manera podemos generar una producción que puede estar alrededor de lo 12 o 13 millones de sacos. Ahora, cuando se va a sembrar una nueva variedad se tiene que tener en cuenta la productividad, la calidad, la resistencia a enfermedades y la adaptación climática”, puntualizó Uribe.