Zanjas ayudan a conservar agua más tiempo en sistemas silvopastoriles

La siembra de arbustos y árboles, propios de los Sistemas Silvopastoriles, va acompañada de todo un esquema de conservación del medio ambiente. Las zanjas de infiltración son una parte importante de la misión.   El agua que permanece en las zanjas ayudará al suelo y material vegetal en épocas de sequía, con lo que se mantendrá verde y con el nivel nutricional suficiente para alimentar a los bovinos.   Gustavo Adolfo Forero, ganadero en Cundinamarca, señaló que la producción de conservación o sostenible es la que ayudará a los productores a tener pasturas verdes todo el año. Su convencimiento surgió de la experiencia que tienen productores con y sin silvopastoriles en la región. (Lea:Así funcionan las fincas verdes)   Algunos predios en la zona conservan silvopastoriles y reflejan en sus predios árboles verdes, pastos saludables, y una temperatura y humedad aceptable en verano, mientras que fincas aledañas a estas se ven con pasturas secas y con un factor climático deficiente.   Ante eso, Forero busca que los productores del Comité de Ganaderos del Área 5 en Cundinamarca, repliquen los casos ejemplares de fincas que introdujeron los silvopastoriles al sistema lechero. Por eso señaló que las zanjas se construyen cada 15 metros de los árboles, tienen una medida de 40 centímetros de ancho por 10 de longitud. Así se convierten en sitios de acumulación de humedad que poco a poco se distribuye en el suelo.   Javier Cuervo, ingeniero agrónomo, con doctorado en fisiología vegetal, dijo que con los ganaderos de Cundinamarca se trabaja para hacer más competitivos sus sistemas y para eso buscan preservar los recursos ambientales en los predios. En un principio se hará la siembra de material vegetal y luego, con el uso eficiente de los silvopastoriles, se sostendrán las producciones lecheras.    “La idea es hacer más con menos. Aprovechar de forma eficiente los recursos”, indicó Cuervo. (Lea: ¿Qué debe hacer un ganadero con agua de las lluvias?)   Andrés Zuluaga, coordinador del programa Ganadería Colombiana Sostenible, manifestó que en el trópico alto, a más de 2.000 metros de altura, se pueden adaptar los silvopastoriles Botón de Oro, Sauco y Tilo. Explicó que en las zonas frías hay que tener más cuidado con la siembra y cuidados de los sistemas vegetales.