Secuestro, un flagelo que no 'suelta' a la ganadería

El asesinato del ganadero Juan Pablo Castillo, quien se encontraba en cautiverio, evidencia que pese a la cuarentena, la inseguridad sigue generando zozobra y temor sobre los productores pecuarios del país.

El pasado martes en horas de la tarde, de acuerdo con La FM, el Gaula de la Policía informó que en medio de una labor de reconocimiento de un sector entre Norte de Santander y Cesar, fue asesinado un hombre, quien permanecía secuestrado desde el 28 de febrero en poder de un grupo delincuencial. (Lea: Sector ganadero suma un nuevo secuestro)

Los hechos se presentaron en el sector conocido como 'pica pica', en límites con ambos departamentos, lugar donde una patrulla de la Policía fue emboscada desde diferentes puntos por parte de delincuentes que se alertaron de la presencia de los oficiales de la Dirección Antisecuestro y Antiextorsión.

De acuerdo con el medio, los uniformados tuvieron que resguardarse y responder al ataque en el que se generó un cruce de disparos contra la banda de delincuencia que tenía en su poder al ganadero Juan Pablo Castillo Esper, el cual estaba en su poder desde febrero, cuando fue plagiado de su finca ubicada en el municipio de San Martín, sur del Cesar.

Según informó el Gaula, "durante el enfrentamiento con los delincuentes, los captores toman la cobarde decisión de ultimar la vida del ganadero de 50 años". Según se pudo establecer, el hombre se encontraba custodiado por varios sujetos fuertemente armados, "en condiciones deplorables". (Lea: Gremio clama por la liberación de ganadera secuestrada)

Tras el hecho, José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, lamentó el hecho a través de su cuenta de Twitter, en donde pidió justicia y se aplique una sanción severa a quienes tomaron la decisión de asesinar a Castillo Esper.

“Lamentamos el asesinato del ganadero Juan Pablo Castillo, en el municipio de Río de Oro, Cesar en el momento de su liberación por parte del Gaula de la Polícia, quien había sido secuestrado el día 28 de febrero del 2020 por parte de un grupo al margen de la ley”, trinó el dirigente.

Este hecho evidencia que los ganaderos siguen siendo blanco de los delincuentes y que el secuestro no deja de tocar la puerta del sector. Vale la pena recordar en febrero también fue plagiado en Norte de Santander el productor José Iván Cetina, quien estuvo en cautiverio más de 2 meses. (Lea: Fue secuestrado en Norte de Santander el ganadero Iván Cetina)

Cetina volvió a la libertad el primero de mayo, tras haber sido secuestrado –al parecer– por miembros del ELN, que lo tuvieron retenido en territorio venezolano.

En marzo el secuestro tocó las puertas de La Guajira. En el municipio de Albania fue retenido el productor Pedro Antonio Morón, quien fue raptado por sujetos armados cuando se encontraba en su explotación en el sector de ‘La Jamichera’, corregimiento de Porciosa.

Aún se desconoce el paradero de Morón, quien de acuerdo a un diario local, es un humilde campesino cuyo poder adquisitivo no era muy alto. (Lea: Casanare monitorea situación de Jaime Rueda Guarín)

El caso más reciente de secuestro se presentó el pasado 25 de abril, cuando el ganadero Jaime Rueda Guarín fue plagiado en su predio ubicado en Hato Macolla, zona rural entre los municipios de Orocué y Yopal.

Hasta allí legó un grupo de 4 hombres armados con carabinas y armas cortas, quienes lo amenazaron y se lo llevaron hacia rumbo desconocido.

Las autoridades trabajan en dar con el paradero de Morón y Rueda Guarín. (Lea: Autoridades suman esfuerzos para controlar inseguridad en Casanare)