Quindío y Caldas sufren por la disminución de pasturas

La temporada seca ha provocado una sensible reducción en la cantidad de pastos para el ganado, situación que tiene preocupados a los productores que deben recurrir a concentrados y otra clase de alimentos, que en este 2015 ya se encuentran muchos más caros.

Mientras en algunas regiones del país el verano ha causado una alarmante disminución en la producción láctea, llegando a niveles críticos como ocurre en Tolima en donde la obtención de leche ha caído hasta en un 50 %, la preocupación de los empresarios pecuarios del Eje Cafetero radica en la escasez de forrajes y pasturas para sostener a los bovinos. (Lea: Pastos de La Mojana y San Jorge no dan abasto con trashumancia)

En Caldas, los productores aseguran que aún no hay una caída considerable en la extracción de leche como han divulgado algunos medios de comunicación, pero señalan que de persistir las dificultades para obtener alimento y pasto podría darse un incremento en el valor del litro de leche.

Andrés Jaramillo Bernal, presidente del Comité de Ganaderos departamental, sostuvo que en Caldas no hay indicadores que respalden una disminución en la producción. Afirmó que en la zona el verano no ha azotado con tanta intensidad como ocurre en otros sectores del país, por lo que duda que se presente una variación drástica en materia láctea. (Lea: Incendios forestales también perjudican la ganadería)

“Nuestra preocupación son las pasturas, las cuales pueden empezar a escasear en algún momento durante la sequía prevista. No obstante, la semana anterior llovió con bastante intensidad durante 4 días, por lo que esperamos que no se disminuya la cantidad de leche que produce la región”, expuso Jaramillo Bernal.

A esta postura se adhirió Paula Hernández, presidenta del Comité de Ganaderos del Quindío, quien manifestó que la sequía ha afectado con más fuerza a los municipios cercanos al Valle del Cauca como son Montenegro, La Tebaida y Quimbaya, en donde se ha observado una caída significativa en la cantidad de pasto.  (Lea: ¿Está el sector lácteo preparado para enfrentar El Niño?)

“No hay indicadores que reflejen una disminución considerable en la producción de leche, pero si nos alarma que haya escasez de pasturas, porque eso puede generar un aumento en el valor de los costos de producción ante la necesidad de adquirir suplementos que reemplacen el pasto”, indicó Hernández.

Ante esta situación, los empresarios pecuarios claman la apertura de las bodegas ganaderas, con el fin de que allí puedan abastecerse del alimento necesario para sus reses y poder soportar la temporada seca que se prolongaría hasta marzo según pronosticó el Ideam.  (Lea: Ganaderos piden al Gobierno apertura de bodegas de alimentos)