Palmicultores de Tumaco, un ejemplo de resiliencia y compromiso con el gremio

Hace cerca de 20 años, la palmicultura en Tumaco (Nariño) se vio arrasada por la enfermedad de la Pudrición del Cogollo (PC) que acabó casi con la totalidad de las plantaciones y hoy día este sector vuelve a mostrar su liderazgo. En esta región la mayoría de los productores son pequeños, quienes junto a Fedepalma y Cenipalma, lograron volver a sembrar con una nueva variedad de palma que les ha permitido una mayor producción y con una productividad que está por encima del promedio nacional.

De acuerdo con el director de Cenipalma, Alexandre Cooman, Tumaco ha pasado por diferentes fases, primero con Elaeis guineensis que se vio totalmente afectado por la punición del cogollo a partir del 2005, 2006 y 2007, una tragedia para muchísimas personas y una pérdida de activos para una gran parte de los palmicultores.

La renovación productiva tuvo también dos fases una primera donde se renueva con los híbridos interespecíficos pero todavía sin tener todo el paquete tecnológico a la mano y “eso lo fue desarrollado Cenipalma, de la mano de productores de palma con la iniciativa y la investigación nuestra y eso lleva a un paquete tecnológico que se consolida en el 2018 y 2019 con la entrega de la tecnología de polinización artificial y a partir de ese año hay una transformación total del sector palmicultor de Tumaco, de un sector que ya no era rentable a un sector donde las personas quieren crecer, quieren ser incluidas y la demostración es que el año después de la entrega de la tecnología de polinización artificial por parte de Cenipalma hubo crecimiento del 28 % en un solo año y después sigue creciendo a un 10, 11 % o más año tras año”. (Lea en CONtexto ganadero: Retos de sostenibilidad para una palmicultura productiva e incluyente)

La productividad como zona es de 4,6 toneladas de aceite crudo por hectárea año, mientras el promedio nacional es 3,6, entonces es significativamente superior y como zona completa es la más alta del país, pero hay otras empresas y subzonas que tienen mucho híbrido donde también se ven productividades espectaculares. Llegar a nueve toneladas por hectárea es posible ya que por ejemplo en el campo experimental de Cenipalma se tienen lotes que ya están en ese nivel entonces eso es la demostración que sí se puede, pero obviamente requiere de un manejo intensivo, permanente tanto en todos los componentes productividad como de sanidad eso requiere acompañamiento técnico y tener toda la disposición de aplicarlo y los recursos para hacerlos realidad.

A su vez, el presidente de Fedepalma, Nicolás Pérez Marulanda, indicó que “en las cerca de 22.000 hectáreas que hay establecidas todavía hay margen para incrementar la productividad. La apuesta es a través del acompañamiento técnico, ayudarles a los productores a incrementar la eficiencia en su cultivo y a lograr una mayor productividad”.

Añadió que “Tumaco es una zona palmera muy dinámica donde hay una gran cantidad de productores de pequeña escala que han encontrado en la palma una alternativa para sustituir cultivos ilícitos para progresar, para llevar alternativas a esta región que tanto las necesita, para nosotros es muy estimulante ver esta cantidad de palmicultores aquí atendiendo los eventos de la Federación”.

Acuerdo con la Gobernación

En el marco de un nuevo esquema gremial, denominado “Colombia Palmera” que son reuniones de tipo técnico que se van a realizar en las cuatro zonas palmeras en que está distribuido el país, también se suscribió un memorando de entendimiento entre la Gobernación de Nariño, Fedepalma y Cenipalma. De acuerdo con Pérez Marulanda “hemos identificado conjuntamente con el equipo del gobernador desde la formulación del Plan de Desarrollo Departamental que hay varios temas que son de interés común, particularmente el fortalecimiento de la palmicultura, en el municipio de Tumaco”. (Lea en CONtexto ganadero: Mayor productividad, eficiencia e innovación, grandes retos de Cenipalma)

El gobernador tiene una apuesta grande dirigida a promover tres cultivos que son la palma, el cacao y el coco y lo que se ha visto es de qué manera la Federación puede apoyar esa iniciativa por la vía sobre todo del acompañamiento técnico a los productores, identificación correcta de los predios, ante las regulaciones internacionales hay que garantizar y seguir protegiendo el hecho de que no haya deforestación asociada con el cultivo y esa es una información que maneja fundamentalmente la Federación.

Entonces, dijo, “con el gobernador vamos a asegurarnos de que desde el comienzo se identifican correctamente los predios, se acompañan actores en la selección del material, en el establecimiento del cultivo y por el lado de la Gobernación lo que habría es unos recursos, tanto del presupuesto del municipio como de regalías para apoyar el establecimiento de esos proyectos”.

Por su parte Cooman, explicó el acuerdo como “una apuesta en común para el sector palmicultor de Nariño, donde el gobernador tiene claro la potencialidad que tiene el sector de crecer, tanto en área como en calidad, y donde la Federación está totalmente de acuerdo con apoyar las iniciativas que puedan mejorar la sostenibilidad del sector. Por un lado, acompañar temas como la identificación de áreas aptas para ser incluidas en un esquema de producción de palma para prevenir también posibles temas de deforestación y por otro lado temas como el desarrollo tecnológico que se requiere para hacer realidad y asistencia técnica, una relación productiva o una ampliación también de área en palma”.

A su vez, el gobernador de Nariño, Luis Alfonso Escobar Jaramillo, manifestó que el acuerdo busca coordinar esfuerzos entre la empresa privada, las asociaciones y el gobierno departamental para aumentar la productividad y la producción palmera. (Lea en CONtexto ganadero: Soñar un mejor futuro para las comunidades de Tumaco)

“Estamos estructurando con ART (Agencia de Renovación del Territorio) un proyecto de 2.000 nuevas hectáreas y mil de renovación, eso aumentaría las áreas de palma de 21.000 a casi 24.000 hectáreas. Vamos recuperando nuestro espacio de producción de palma, pero sobre todo lo más importante es que vamos a ir aumentando en productividad, nos hemos planteado y debe ser una apuesta nuestra, superar las 4,6 toneladas por hectárea y allí el tema de ciencia y tecnología y el trabajo que vamos a hacer con Cenipalma es importante”, indicó.