Heladas tienen alarmados a ganaderos de Cundinamarca

En la mañana del pasado viernes 21 de octubre, los productores del altiplano se despertaron con un desagradable panorama: la niebla se había posado sobre sus potreros y causó daños en sus pastos.   Los reportes surgieron de distintos sectores del departamento. En municipios como Suesca, Ubaté y Villapinzón al nororiente, Zipaquirá y Cajicá en el centro se presentaron bajas temperaturas en horas de la noche que helaron los pastos.   Eleazar Corredor, ganadero de la sabana, comentó que en las 2 fincas que arrendó para dedicarse al negocio, cayó una helada en la madrugada del viernes. (Lea: Lecheros de Cundinamarca piden al MinAgricultura política para el sector)   “Supuestamente esta es la temporada de invierno, cuando prácticamente llevamos varios años de sequía. Ahora para rematar, nos cayó hielo”, señaló.   Corredor explicó que a pesar de que la helada no fue tan dura como otras que se han registrado en épocas anteriores, algunos pastos se queman y otros se ven afectados porque su crecimiento se suspende.   “El daño no fue inmediato. Pero estamos en verano, bregando para regar los pastos, y de remate una helada, entonces los pastos se van a estancar, se van a quedar ahí”, manifestó. (Lea: Ganaderos de la Sabana de Bogotá, afectados por las heladas)   A su vez, Andrés Guevara, propietario de un predio en Suesca, explicó que en las heladas se presentaron en el sur del municipio y se extendieron por casi todos los predios.   “En mi finca escarchó la noche anterior. En los últimos días ha habido mucha radiación solar y no se ha presentado mucha nubosidad, entonces el suelo se ha resecado de forma rápida, lo que ha provocado las heladas”, declaró.   En Nemocón, en la vereda Checua, se registraron temperaturas de 3 grados bajo cero. Un ganadero calificó la situación como “grave”, pues al parecer la neblina se extendió por toda la sabana de Bogotá. (Lea: Ganadero, combata las heladas con los pastos adecuados)   Lo que tiene más desconcertados a los productores es que el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, había pronosticado fuertes “lluvias de mayor intensidad y de volúmenes acumulados más altos entre el 18 y el 23 de octubre”.   Para evitar daños por las heladas, Guevara cuenta con un sistema de riego con aspersión con el cual humedece el forraje y previene que se siga quemando. Sin embargo, admitió que no puede controlar el deterioro del forraje si el fenómeno llega a intensificarse.   El problema de las plagas   Corredor también advirtió por los ataques de plagas que han ocurrido en sus predios, lo que ha disminuido la cantidad de forraje disponible para sus pastos. (Lea: Con la siembra de silvopastoriles se contrarrestan las heladas)   “El chinche y otros insectos están incontrolables porque el verano ha durado mucho. El temor aquí es que no va a haber pastos o se van a demorar más en crecer”, precisó.   El productor contrarresta las plagas fumigando insecticida, aunque es consciente de que este remedio es incluso tan nocivo como la enfermedad. No obstante, sabe que no tiene otra alternativa si no quiere detener la producción de sus predios.   “Todo es culpa del cambio climático: las plagas, las heladas. En esta época deberíamos estar en invierno y ¿qué tenemos? Verano, cielo despejado, y desde ayer, heladas”, lamentó Corredor.