Ganaderos de Cundinamarca afectados por recientes cambios de clima

Productores de la sabana de Bogotá lanzaron la voz de alerta por la disminución de la oferta forrajera debido a las lluvias de marzo y las heladas de comienzos de abril. Señalaron que sin pastos para su ganado, la producción de leche se fue al piso.   Desconcertados están los ganaderos de la región por las bruscas alteraciones del tiempo atmosférico. En enero y febrero cayeron fuertes heladas que ocurren normalmente en esos meses y acaban con los pastos.   Pero el mes de marzo, que tradicionalmente es seco, estuvo colmado de lluvias, mientras que la primera semana de abril, que normalmente trae las lluvias, fue extremadamente calurosa.   Si bien los productores son conscientes de las dificultades que supone del cambio climático, no cuentan con el suficiente conocimiento para sortearlo. (Crónica: El ganadero que aumentó la producción de sus vacas sembrando árboles)   Andrés Guevara, propietario de un predio en Suesca, contó que tuvo que lidiar con las heladas de febrero y las lluvias de marzo. Según él, varios predios se inundaron en el tercer mes del año por cuenta de las fuertes precipitaciones.   “Aunque en mi finca no llovió tanto como en otros sectores, tuve necesidad de mover agua para sacarla de la finca”, dijo.  

Luego, en la primera semana de abril, se presentaron heladas en varios municipios de Cundinamarca como Cogua, Sopó, Ubaté, Zipaquirá, entre otros. (Lea: Bajas temperaturas en Altiplano cundiboyacense congelan hasta la leche)   Luis Eduardo Botero, productor de Cogua, afirmó que con las heladas que cayeron el pasado miércoles 5 y jueves 6 de abril se quedó sin pastos.   “Estaba lloviendo en un tiempo normal, pero de un momento a otro hizo un sol espectacular sin una sola nube. Al otro día tuvimos una helada impresionante. Es muy difícil (ejercer) la ganadería así”, declaró.   Estas heladas, más las que cayeron en diciembre y enero, lo dejaron sin pastos y tuvo que recurrir a los silos que almacenó antes de tiempo. (Lea: Efectos del silicio sobre pastos ayudan a combatir heladas)   “Las heladas anteriores de diciembre y enero fueron arrasadoras. Yo nunca había tenido una helada tan impresionante. Prácticamente acabaron con el pasto y entonces uno tiene que recurrir al silo que guardado”, añadió.   Escuche la declaración del productor de Cogua.

Tanto Guevara como Botero han visto cómo su flujo de caja se reduce debido a la baja en la producción de leche y al incremento en los costos de producción. Ambos se vieron obligados a recurrir a suplementos en tiempos en que no lo habían planificado.   De hecho, Botero expresó su malestar por las dificultades que ha experimentado en los últimos años por cuenta de los pocos réditos que recibe al desempeñar un oficio que cada vez resulta mucho más difícil de sobrellevar.   “Se vuelve costosa la producción y el precio que pagan por la leche no da para producirla en estas condiciones”, puntualizó. (Lea: Cundinamarca, otro departamento golpeado por recientes heladas)