Fuerte verano obliga a productores del Cesar a vender sus animales

Los ganaderos han apelado a descargar la finca y vender sus animales, ya que carecen de alimento y las posibilidades para conseguirlo son pocas. La producción láctea también resultó afectada.

Los efectos de la sequía siguen sintiéndose con fiereza en varias regiones del país. El Caribe colombiano no es la excepción, especialmente en el sur del Cesar. En dicha región, desde la primera quincena de diciembre no se registran lluvias, el alimento ha empezado a escasear y ya hay cifras que reflejan una caída en la producción de leche cercana al 50%. (Lea: Calidad de la leche en Colombia disminuye por el verano)

La falta de comida para el ganado y la poca opción que existe para suplementar a los semovientes ubicados en la zona, especialmente en el municipio de Gamarra, ha obligado a los ganaderos a que disminuyan la carga de sus hatos, por lo que hay una elevada oferta de animales y una evidente caída en los precios, perjudicando a quienes se dedican a su comercio.

Óscar Ortiz Agudelo, profesional de Gestión Productiva y Salud Animal de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, para el proyecto del sur de Cesar y Bolívar, reseñó que lo que están viviendo los empresarios de esa zona es complejo, debido a la disminución en la producción de leche y los bajos precios que se están pagando por los animales. (Lea: Ganaderos denuncian falta de ayuda para enfrentar el verano)

“Los ejemplares que están en buena condición se venden en $2.800 el kilo, pero los que no se comercializan entre $2.200 y $2.400. Acá juega mucho la oferta y la demanda, entre más ganado se empiece a vender, más barato lo van a pagar, afectando los ingresos de los productores”, reseñó Ortiz Agudelo.

Por su parte, Víctor Páez, ganadero y comerciante de la zona, aseguró que el verano en esa zona del país siempre golpea muy fuerte, pero en esta ocasión ha sido más duro que en otras oportunidades, ya que apenas está empezando el mes de febrero y las pasturas están secas, por lo que quienes tienen los recursos económicos están suplementando, pero el resto debe acudir al uso de sales mineralizadas o melaza, para evitar que las condiciones corporales de los bovinos decaigan notoriamente. (Lea: Quindío y Caldas sufren por la disminución de pasturas)

“Estamos alarmados porque la sequía apenas llegó a su primer mes y creemos que va a durar más. Nos ha tocado vender porque no hay forma de sostener a los animales, sé que hay otros colegas que guardaron silo suficiente y han tenido cómo alimentar al ganado, pero muchos otros no lo hicieron, por lo que su única salida ha sido el comercio”, ratificó Páez.

Santander registra reducción en materia láctea

Según información revelada por Lácteos Tamacara, en la provincia comunera se presentó una caída del 6,15 % entre la primera quincena de diciembre de 2014 y la primera de enero de 2015, situación que ha generado alerta en la zona.

La disminución en los niveles de producción, aducen, se presenta como consecuencia del verano que se vive en esa región del departamento. (Lea: Alzas en los precios de los insumos preocupan a los ganaderos)