En Los Santos no llueve hace 30 meses, ganaderos sin ayuda

Los ganaderos de Los Santos, en Santander, no han visto caer una sola gota de lluvia en 2 años y medio. Crece la preocupación por la escasez de agua y la falta de ayuda para solventar la crisis.

Dentro de pocos días el país sentirá de nuevo los efectos del Fenómeno de El Niño, razón por la cual los ganaderos se vienen preparando para soportar la fuerte oleada de sol que, según el Ideam, vivirá Colombia durante varios meses.

Los ganaderos de los Santos, la región santandereana , llevan 30 meses esperando por un aguacero. Allí la situación contrasta con zonas del país anegadas durante meses, sin embargo tan constante es el tema que paulatinamente han ido aprendiendo a sobrellevar de la mejor manera la escasez del líquido. (Lea: Ganaderos, los más afectados con el verano en Colombia)

En Los Santos, los empresarios pecuarios utilizan cualquier maniobra que les permita llevarles el mínimo vital del líquido a sus reses, sin embargo cada vez se dificulta más hacerlo por lo que la preocupación se ha ido apoderando de los habitantes de la región.

Según manifestó el alcalde del municipio, Carlos Eduardo Torra, las casi 3.000 familias que viven en el municipio no tienen qué tomar, ni qué comer. “Estamos muy preocupados porque ante la falta de lluvias, ya no hay cultivos, ni ganado, ni cabras, ni nada que vender. Mis coterráneos se están endeudando porque no tienen cómo generar ingresos”, reseñó el mandatario. (Lea: Más de 3.000 reses muertas por verano en Arauca y Casanare)

Ante esta delicada situación, CONtexto Ganadero habló con José Cárcamo, un empresario bovino ubicado en la zona dedicado a la producción doble propósito, quien explicó lo que ha venido haciendo para que su explotación se mantenga ante la prolongada ausencia de lluvias.

Cárcamo sostuvo que estas condiciones climáticas lo han obligado a arrendar predios para producir pastos, ya que en el suyo hay baja producción, reproducción e ingresos.

“Es una situación bastante complicada, porque no han caído aguaceros contundentes, solo ha habido unas lluvias leves y poco frecuentes, entonces hemos recurrido al suministro de heno; muchas veces tenemos que conseguir pastos por otro lado, bien sea arrendando algunos potreros en otras regiones o comprando pasto de corte, es decir, nos toca hacer ‘maromas’, como se dice popularmente para poder brindarle lo mínimo que necesitan los animales”, aseguró el ganadero. (Lea: Verano azota al país y faltan medidas para mitigarlo)

Además de la falta de alimento adecuado y suficiente para los rumiantes, el otro problema es la falta de agua, razón por la cual los productores santeros deben acudir a pozos profundos o jagüeyes, los cuales han sido su carta de salvación.

“Yo tengo un jagüey bastante grande, que es el que nos ha salvado en estas épocas de bastante escasez, pero en otras regiones tienen que traer el agua en carrotanques, que es lo más normal. Hay zonas donde también tienen jagüeyes pero se de muchos que se han secado, entonces la complicación es bastante grande”, expresó Cárcamo. (Lea: Suplementar animales y guardar alimento, estrategias contra verano)

Entre las principales afectaciones para estos habitantes se cuentan los pastos quemados, pasturas sin proteínas, muchas otras que no crecen y todo lo anterior redunda en falta de alimento de calidad para los animales.

Nadie del Gobierno ha puesto sus ojos sobre esta región y a los ganaderos solo les resta esperar que para cuando lo hagan no sea demasiado tarde.