En Guainía, 4 vacunadores aplican dosis a 10 mil bovinos

Es la primera vez que la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en aras de ampliar la cobertura durante el ciclo de vacunación, llega a esta zona del país. El reto es grande, debido a que esta es una región que cuenta con un número importante de cabezas de ganado por vacunar.

El día para Joaquín Linares empieza a las 5 am. Él es uno de los 4 vacunadores del departamento de Guainía. “El verdadero reto es al momento del pago de la vacuna de fiebre aftosa porque la gente no maneja dinero en esas zonas apartadas, entonces me he encontrado con casos en los que me dicen: “si quiere llévese esa gallina” y uno se va en lancha con un animal de esos, pero ¿se imagina hacerlo así en todos los predios?”

Esta es la primera vez que se empieza a vacunar en este departamento, de acuerdo con los objetivos de ampliación de cobertura de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán. (Lea ‘Ciclo de vacunación 2013, con el reto de ampliar la cobertura’)

Maribel Ruiz, programadora de Fedegán, califica esta labor como “maratónica”, ya que desde el 6 de mayo, 4 vacunadores aplicarán la dosis contra fiebre aftosa y brucelosis a 10 mil cabezas de ganado en 150 predios.

“En el casco urbano contamos con toda la seguridad. En el desplazamiento a las zonas más lejanas, que pueden durar desde 3 horas, hasta días en lancha, tenemos un parte de seguridad, que nos garantiza la movilización como entidad, en dado caso si llegan a detener a un vacunador para saber qué hacen, generalmente los reconocen y no hay ningún problema”, explicó Ruiz. (Vea ‘Vacunadores en Ocaña y Ayapel viven una verdadera maratón de 45 días’)

Según la funcionaria de Fedegán, el desarrollo del primer ciclo de vacunación en esta región cuenta con el apoyo de la Gobernación de Guainía, la Alcaldía Municipal de Inírida y el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, donde además de realizar un acompañamiento, verifican que se lleve a cabo la vacunación de animales y también realizan censos para actualizar información.

(Foto: Maribel Ruiz)

No hay trochas o caminos de herradura

“El transporte es fluvial y en muy son pocas ocasiones uno tiene que caminar para poder llegar a las fincas. Pero a veces la dificultad más grande es el clima porque los animales están en potreros y si llueve se vuelve más dispendioso trasladarlos”, expresó el vacunador. (Lea ‘Inundaciones impiden vacunar a 1.200 animales en Meta’)

Según la programadora de Fedegán, las jornadas arrancan desde la noche anterior preparando todo lo relacionado con la movilización de los vacunadores para realizar esta labor de barrido (metodología aplicada por Fedegán durante el ciclo de vacunación). “Al día siguiente, desde las 5 de la mañana se organiza el biológico en cavas de hielo para garantizar la conservación de la vacuna hasta el momento de la aplicación de la dosis en cada animal”.

Para lograr obtener buenos resultados se establecieron dos rutas que son guiadas por funcionarios municipales y gubernamentales. En la primera ruta, en la cual se encuentran 8 mil bovinos, se designaron 2 vacunadores que atraviesan los ríos Guaviare y Orinoco.

“En la segunda ruta hay dos recorridos largos con un tiempo de 22 días seguidos sobre la zona del rio Guaviare hasta llegar a Raudal-Mapiripán y de regreso por el río Uva hasta Inírida, donde se espera cubrir la vacunación de 2.000 bovinos en 50 predios”, comentó Maribel Ruiz.

“Desde hace 20 años tengo trato con los animales, entonces esta labor que he venido haciendo me gusta porque todos los días aprendo más, esto a veces tiene sus riesgos, pero no es aburridor, por eso lo hago”, puntualizó Linares.

(Foto: Maribel Ruiz)