Desplazados de Cúcuta se rehúsan a retornar a sus tierras por temor

Ante la falta de garantías por parte del Gobierno departamental, varios campesinos de la zona rural de Norte de Santander que desalojaron sus predios por la violencia, aseguran que no regresarán.

Semana y media después del masivo desplazamiento de la población del corregimiento de Palmarito, ubicado en la zona rural de Cúcuta, el regreso a sus tierras se comienza a dar con temor, pese a las garantías anunciadas por el Gobierno Nacional.

De otro lado, a raíz del acta de compromiso que se pactó entre las autoridades competentes y los labriegos desplazados para iniciar su retorno, diferentes líderes de la comunidad dicen que esperan que se cumpla con las condiciones del documento. (Lea:Más de 200 campesinos llegan a Cúcuta huyendo de la violencia)

“Esperamos que nos sigan acompañando, tal cual se acordó, porque si eso es un contentillo por 2 o 3 días, pues quedamos en las mismas y tendríamos que volver a salir corriendo de nuestras tierras”, expresa uno de los habitantes de la población.

Por su parte, la Defensoría del Pueblo en Norte de Santander, en cabeza de la directora seccional, Carmen Ligia Galviz García, anuncia que de forma articulada con las demás autoridades en el departamento, protegerán a los labriegos mediante un control de vigilancia y acompañamiento.

“Están solicitando ir con alimentos, porque ellos regresan y no van a encontrar nada. Estaremos nosotros continuamente monitoreando esta situación por medio del sistema de alertas tempranas”, informa Galviz García.

Algunos campesinos se rehúsan a volver

Aunque se han dado garantías por parte del Gobierno y las autoridades, varios campesinos se rehúsan a retornar a sus tierras y hacen hincapié sobre el miedo que tienen de regresar a sus predios, al asegurar que la guerrilla y las bacrim continúan en la zona. (Lea: Colombia es de lejos el país con más desplazados en el mundo)

“Se confirmó, efectivamente, que los delincuentes que asesinaron a nuestros vecinos y nos amedrentaron a nosotros, aún se mueven como perro por su casa. Estamos privados prácticamente de la libertad porque hay unas rutas por las cuales no podemos pasar, pues están ellos haciendo retenes”, señala uno de los labriegos quien no regresará al corregimiento de Palmarito.

Ante esto, el gobierno departamental iniciará un nuevo proceso de revisión en conjunto con la fuerza pública, para reforzar labores en materia de seguridad que les devuelva la confianza a los campesinos que continuarán en los centros de albergues habilitados para su atención y asistencia humanitaria.