Arroceros en Córdoba piden al Banco Agrario 7 años de gracia

La situación económica de los agricultores en el municipio de Ayapel es crítica. Los productores piden un tiempo para saldar sus deudas, pero el entidad financiera aún no ha entrado a evaluar la iniciativa.

Los productores de arroz en el municipio cordobés de Ayapel, le pidieron al Banco Agrario 7 años 'muertos' para poder quedar al día con los $2mil 100 millones que le adeudan por préstamos solicitados para sus cultivos. La propuesta surgió en la reunión que establecieron los arroceros con Francisco Estupiñán Heredia, presidente de la entidad bancaria. ("No queremos hablar más con el ministro de Agricultura": arroceros del país). 

“Desde el Banco Agrario estamos realizando un estudio para tomar una decisión en cuanto a cobros jurídicos se refiere. La idea es darle una opción al productor para que pueda refinanciar su deuda y no llegue a esas instancias Obviamente, nosotros estamos entendiendo la situación por la que están pasando los agricultores de La Mojana”, agregó Estupiñán Heredia.

Aunque el presidente de la entidad bancaria anunció el estudio, aún no se ha considerado la iniciativa de los siete años muertos para el pago de las deudas de los arroceros, como la propusieron ellos.

El director ejecutivo de la Asociación de Arroceros de la Baja Mojana y el San Jorge, Édgar Imbett Ricardo, afirmó que “la crítica situación de los productores de Ayapel ya se le ha presentado en varios escenarios al presidente de la República, Juan Manuel Santos, a algunos de sus ministros e incluso a funcionarios de organismos nacionales. Sin embargo, todavía no se ven los resultados de las acciones, por eso los agricultores en esta zona del país se siente abandonados por el Gobierno Nacional”. (Arroceros de La Mojana esperan que el Gobierno les cumpla). 

La situación de los arroceros, uno de los mayores eslabones en la economía de la región, ha repercutido en los demás sectores del municipio. Los comerciantes, quienes también tienen deudas con el Banco, han tenido que cerrar sus locales por la falta de clientes, lo que ha generado una difícil situación.