Amonificación de praderas, alternativa viable para el verano

Ante la fuerte sequía que viene sufriendo el país y la escasez de alimento para el ganado que eso ha generado, una serie de productores participó en un taller en donde conocieron las ventajas de esta estrategia, que les permite aprovechar aquellos pastos toscos para nutrir a los semovientes.   La actual temporada seca que están soportando la mayoría de productores colombianos, los ha llevado a buscar estrategias que les permita poder seguir alimentando sus semovientes con materiales económicos. Sin embargo, el tema parece ser complejo ante la nula presencia de precipitaciones. (Lea: Pequeños ganaderos de Córdoba cultivan agua y pastos para el verano)   Ante tal panorama, en Tolima, los productores pertenecientes al círculo de excelencia de Ibagué, participaron en una capacitación sobre amonificación de praderas: una alternativa que permite usar pastos deteriorados y suministrárselos a los semovientes logrando que ese alimento llegue en condiciones más aceptables.   Juan Carlos Arcos, profesional del Fondo Nacional del Ganado, FNG, en Gestión Productiva y Salud Animal en la capital musical de Colombia, aseguró que según los estudios que se han adelantado frente a ese proceso, es la única alternativa de conservación de forrajes en donde el alimento que se le va a destinar al animal gana calidad. (Lea: Ganaderos pueden desafiar el verano con bloques nutricionales)   “Otras opciones conocidas como son el ensilaje, henificación o henolajes, preservan la misma calidad que posee la pastura con la que se elaboró, mientras que en este caso se van a ganar entre uno y 3 puntos más de proteína por el efecto que tiene el amoniaco sobre el forraje”, precisó Arcos.   Además, según el profesional, el valor agregado es que pueden usarse pasturas toscas, tamos, residuos de cosecha y pasto ya pasado para llevar a cabo la amonificación y el resultado será positivo. (Lea: Vacas desnutridas: menos partos y poca leche)   En tanto, Mario Vanegas, productor ibaguereño, integrante al círculo de excelencia de la ciudad y quien asistió al evento, sostuvo que desde hace muchos años le ha apostado a esta fórmula para conservar los forrajes, especialmente en momentos cuando el pasto es poco y solo es viable brindarles a los semovientes alimento de no muy alta calidad.   “Yo amonifico como una reserva, lo voy haciendo paulatinamente y guardo para tener el material disponible en temporadas críticas como la que estamos viviendo actualmente. Eso me ha permitido tener algo de comida que sirve para mantener el ganado y mitigar el efecto de estas épocas”, expuso Vanegas. (Lea: Silo de soja, alimento potencial para el ganado en Colombia)   ¿Cómo se amonifican los forrajes?   El amoniaco es obtenido de la urea agrícola. Para eso, el producto se diluye en agua dependiendo de la cantidad de forraje que vaya a ser amonizada. Una vez esté listo, se le aplica suficiente al forraje y posteriormente se cubre.