Fedegán alerta a los gremios sobre proyecto de propiedad de la tierra rural

A través de una carta, el presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos, José Félix Lafaurie Rivera, les manifestó a las asociaciones pecuarias los pormenores de la iniciativa que viene ambientando el Gobierno y la amenaza que el proyecto genera a la seguridad jurídica de la propiedad privada.   Uno de los temas en los que se ha focalizado la diferencia entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y el gremio ganadero, en cuanto a las negociaciones de La Habana se refiere y la visión rural, es todo lo relacionado con la tierra y la propiedad privada. (Lea: Fedegán reitera advertencias sobre reforma a la propiedad de la tierra rural)   Por esa razón, el presidente ejecutivo de Fedegán, José Félix Lafaurie Rivera, les envió a los diversos representantes y líderes de asociaciones pecuarias del país una carta y un análisis en donde busca llamar la atención ante el ambiente que viene teniendo el proyecto de “Ordenamiento Social de la Propiedad y Tierras Rurales”, con el que se pretende dar cumplimiento a lo acordado con las Farc.   A través del texto (léalo completo en este enlace), el dirigente gremial les recuerda a sus colegas la situación que se presentó en Venezuela, hechos que fueron descritos durante el pasado Congreso Ganadero que se realizó en diciembre del año anterior en Barranquilla. Allí, el presidente de Fedenaga, Carlos Albornoz narró la situación compleja y trágica que viven los productores rurales de Venezuela.   “Para nadie es un secreto que el régimen del Socialismo Bolivariano implantado por Chávez, profundizado y degradado por Maduro, comenzó con una toma de la economía rural y de los activos productivos más importantes del empresariado venezolano. Ahí quedó sembrada la maleza que, con el paso de los años, aunada a la ineptitud y corrupción de los gobernantes, se arraigó en la sociedad, en las instituciones y el aparato productivo de Venezuela, arrastrando todo a su paso, como una avalancha, hasta el colapso de la economía rural”, asevera la misiva. (Lea: Gobierno presentará proyecto de ley sobre propiedad de tierras)   Lafaurie Rivera argumenta que la iniciativa a la que el Estado le viene haciendo un ruido importante no fue concertada con los productores del campo y mucho menos con las agremiaciones más representativas, por lo que guardando las proporciones, dice el dirigente, guarda preocupantes similitudes con las leyes y decretos que en esta materia promulgo en su momento Hugo Chávez.   De paso asegura que la propuesta del Gobierno deroga y modifica varias normas, entre ellas la Ley 160 de 1994, conocida como Ley de Reforma Agraria y Desarrollo Rural. Por lo que es evidente que la propuesta planteada incorpora una modificación sustancial a los conceptos jurídicos y las estructuras institucionales sobre la propiedad de la tierra, lo cual contradice abiertamente a lo que en su momento aseguró el jefe negociador con las Farc, Humberto de la Calle Lombana, quien en una sesión de Junta Directiva de Fedegán, “garantizó” que todo lo acordado sobre tierras en la Reforma Rural Integral estaba en la Constitución y en las leyes vigentes, que no se requería legislar nada más.   “El proyecto proclama una transformación estructural de la realidad rural del país con equidad, igualdad y democracia, pero no explica en qué consiste ese “revolcón” en términos de las variables objetivas que modifiquen el atraso social y productivo del campo colombiano”, amplia la misiva. (Columna: Acuerdo Agrario II – La tierra)   A eso le sumó la responsabilidad que tiene Fedegán como gremio, entidad que nació hace 54 años para defender el derecho constitucional a la propiedad privada de la tierra rural, como una reacción institucional y democrática del sector a la política de los gobiernos de la época.   “Nunca hemos estado en contra del legítimo derecho de un campesino a la propiedad de la tierra, pero quisiéramos ver primero, o al mismo tiempo cuando menos, la reglamentación, los recursos y la ejecución de los planes nacionales en educación, salud, vivienda, asistencia técnica, crédito, comercialización, etc., los cuales hacen parte de una verdadera reforma rural integral. Lo uno sin lo otro no es más que la perpetuación de la pobreza, pero, además, un camino abierto al atropello al derecho constitucional a la legítima propiedad de la tierra”, concluye.   El presidente del gremio cúpula de la ganadería les pidió a sus colegas y representantes de asociaciones productivas leer las consideraciones hechas por Fedegán y divulgar lo que viene con la iniciativa que viene liderando el Gobierno. (Columna: El estigma de la tierra)