Los búfalos, aunque rústicos y fuertes, también requieren un plan sanitario

Los búfalos al igual que los vacunos requieren de cuidados de manejo de sanidad y de bienestar animal que les permitan conservar la salud y la productividad que se requieren.

Aunque son animales rústicos y fuertes, con un buen sistema inmunológico que los hace resistentes a muchas enfermedades, no quiere decir que no se deba contar con un manejo sanitario acorde con el entorno y teniendo prácticas de manejo que representen las normas de bienestar animal enmarcadas en los cinco principios o libertades, señaló Ricardo Arenas, médico veterinario especialista, en un nuevo capítulo del Manual Práctico Ganadero, elaborado por Fedegán..

La especie bufalina no es de hierro, hay una falsa creencia entre productores sobre que el búfalo no necesita cuidados preventivos, cosa que es totalmente errónea pues por experiencia se ha visto la importancia de tener planes sanitarios organizados y que se manejen de forma preventiva lo que garantizará el éxito productivo y económico que se busca.

El búfalo es un animal altamente sensible a los cambios bruscos pues les genera estrés, lo que facilita la prevalencia de hemoparásitos endémicos en ellos, reduciendo su productividad y calidad de vida en general. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca cómo es el ciclo de productivo y reproductivo de los búfalos)

Adicional al plan vacunal de obligatorio cumplimiento en relación con la fiebre aftosa y la brucelosis bovina, es necesario contar con un plan sanitario diseñado según las condiciones particulares donde se encuentre y definido por un médico veterinario, garantizando así la salud de los animales y la calidad de los productos.

Este debe incluir la vacuna triple bovina toda vez que las zonas tradicionales de producción bufalina, con altas humedades y temperaturas, hacen que existan fácilmente enfermedades respiratorias, principalmente en animales jóvenes, también se debe desparasitar según la zona y vitaminizar los animales de acuerdo con el criterio médico y zootécnico.

Otros cuidados

Los cuidados prenatales son muy importantes en esta ganadería con el fin de mantener unos porcentajes de morbimortalidad adecuados Es recomendable desparasitar la búfala preñada a los 280 días de gestación, antes de pasarla al lote de paritario y la primera desparasitación de la cría debe realizarse máximo en los tres primeros días de vida.

Al igual que en los vacunos es indispensable realizar la curación adecuada del ombligo para evitar onfalitis y el ingreso de diferentes parásitos y enfermedades al neonato, así como asegurarnos que el consumo de calostro sea suficiente y en las primeras horas de nacido. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca algunas diferencias y similitudes entre búfalos y vacunos)

Las crías se deben desparasitar una vez al mes hasta que cumplan 12 meses de edad y rotar los productos y sus componentes activos para una mejor acción. Los animales entre los 12 y 24 meses de edad se deben desparasitar mínimo dos a tres veces al año, de acuerdo con la carga parasitaria que se tenga en la finca y la aplicación de complejos multivitamínicos 8 días posteriores a la desparasitación.

En términos generales los potreros y pasturas son deficitarios en cobre por lo que es importante que las novillas bufalinas al ser expuestas a reproductor se les realice una aplicación de este mineral para beneficiar la actividad ovárica y mejor desarrollo de su aparato reproductivo.

El uso de antiparasitarios externos o baños es muy importante principalmente en las crías y especialmente en las épocas de transición de invierno a verano y verano a invierno pues es en este momento donde mayor prevalencia de vectores que causan las afectaciones demotrópicos aumentan.

En cuanto al manejo de la especie, lo más importante es el buen trato y el máximo confort en términos de muy buena sombra y agua fresca a voluntad para beber pues si bien es cierto que los animales hacen lodazales o pozos, con lodo, estos solo los hacen cuando no tienen cómo disipar el calor y/o son sometidos a estar en un mismo lugar por mucho tiempo en una evidente mala labor de pastoreo. (Lea en CONtexto ganadero: El búfalo le da la mano a la ganadería bovina, especialmente en épocas críticas: Asobúfalos)

La suplementación mineral es también un requerimiento de los búfalos al igual que los vacunos, pese a su gran resistencia al calor es importante evitar el traslado de los animales en las horas más calurosas del día.

El plan de vacunación de enfermedades oficiales está definido por el ICA como autoridad sanitaria del país, eso incluye brucelosis y fiebre afosa, así como rabia bovina. La vacunación contra las demás enfermedades debe establecerse de acuerdo a los riesgos potenciales que se tengan y a pruebas diagnósticas que se realicen, contando siempre con el criterio de un profesional en medicina veterinaria.

Por el bienestar y la salud de los animales no se recomienda realizar desparasitaciones o aplicar vitaminas o cualquier otro tipo de vacunas durante los momentos en que se vacuna contra fiebre aftosa y brucelosis bovina.