Más de 5,3 millones de bovinos y bufalinos alcanza el II Ciclo de Vacunación contra aftosa, en su segunda semana
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Por CONtexto ganadero - 18 de Septiembre 2023
El problema de las garrapatas en los bovinos ocasiona pérdidas para el negocio ganadero y se deben tomar medidas para reducir su incidencia. Países como Uruguay tienen, incluso, una ley para combatir esta situación.
Las garrapatas son un problema para la ganadería bovina por todos los problemas de salud y económicos que acarrea al hato y de ahí la importancia de tener estrategias de control.
La prevención y control de enfermedades parasitarias del ganado es esencial para asegurar el bienestar del hato y por supuesto la calidad de las materias primas provenientes del mismo. Uno de esos agentes parasitarios frecuentes, sobre todo en regiones con clima tropical y subtropical son las garrapatas.
El panorama no es para nada sencillo teniendo en cuenta la resistencia que estos parásitos han desarrollado a los garrapaticidas, el cambio climático que favorece la proliferación de los mismos y la ineficacia de las medidas a menudo recomendadas por los proveedores de insumos, según un blog de la firma Agrocampo.
Un país que da ejemplo de ello es Uruguay donde existe la Ley de Garrapata, que declara al parásito plaga nacional, fija sanciones y aporta recursos del gobierno para combatirlo. Con base en ello, la Dirección General de Servicios Ganaderos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca decidió declarar zonas libres de garrapata, pero a su vez, continúa afinando los últimos detalles de la resolución que permitirá la circulación de ganado con garrapata cáscara (muerta), según informó el diario El País de ese país.
La implementación de zonas libres de este ectoparásito, comenzará por el departamento de Rocha. Desde las mismas, el productor tendrá la ventaja de poder mover sus ganados sin realizar el despacho de tropa, sin embargo, esta herramienta será exigida a rajatabla para el ingreso de ganado a esos predios. El denominado despacho de tropas implica un conjunto de actividades (identificación, inspección y tratamiento) que se aplica para certificar que el tránsito de bovinos, se realice libre de garrapata cualquiera sea su estado.
Si bien hay predios con serios problemas para combatir la garrapata por la multiresistencia a uno o más específicos veterinarios usados en los tratamientos, “son muchísimos los establecimientos que no tienen garrapata”, reconoció el Director General de los Servicios Ganaderos, Diego de Freitas, citado por el medio uruguayo. (Lea en CONtexto Ganadero: Esta es la garrapata que tiene mayor impacto en la ganadería)
Para el caso de las ferias ganaderas “hay una propuesta a nivel extraoficial de permitir que el ganado gordo, que se destina al abasto, pueda ingresar a las ferias si tiene garrapata y luego va a frigorífico de abasto (no de exportación)”, señaló de Freitas. Esos animales no podrán tener contacto con el resto del ganado de la feria, deberán estar aparte y ser vendido para faena con destino al mercado interno.
De acuerdo con la Ley de Garrapata no se permite la venta en subasta pública de ganados con garrapata. Cuando se compruebe el parásito en animales que concurran a exposiciones, remates, ferias o liquidaciones, se les saneará de inmediato, sin perjuicio de las sanciones que correspondan.
La meta es encontrar soluciones en conjunto y hacer que el ganadero cumpla. Así mismo, en cuanto al ganado con cáscara se plantea que el comprador debe saber que está comprando ese tipo de ganado y determinar si lo acepta o no.
En Colombia no existe una ley como esa, pero el tema del control de garrapatas forma parte de la “metodología para la evaluación del bienestar animal en las especies bovina y bufalina”.
Entre los apartes de dicha cartilla se recuerda que una de las cinco libertades es la de “libre de dolor, lesión y enfermedad” y uno de los criterios es “libre de ectoparásitos”, siendo uno de los indicadores la presencia de garrapatas, lo cual aplica tanto para ganadería de leche, como de carne y doble propósito.
En la descripción del criterio se indica que se debe hacer una selección de animales de acuerdo con el método de verificación y realizar la inspección visual en busca de moscas, nuches, miasis y garrapatas. (Lea en CONtexto ganadero: Garrapatas hacen perder 200 litros por bovino al año)
Una vez seleccionados los animales para inspección, a cada uno se les establecerá el porcentaje de cada tipo de ectoparásito. Las garrapatas se observan en general en la zona detrás de las orejas, ingle, base de la cola y ubre. Para efectos exclusivamente de evaluación se considera infestación por garrapatas cuando se observa al menos en dos de estas zonas.
Así mismo, en la norma que establece los requisitos para la certificación de establecimientos exportadores de bovinos y bufalinos en pie y los destinados a sacrificio para la exportación de carne, se indica que uno de los requisitos es verificar la ausencia de ectoparásitos (miasis por gusano barrenador del ganado, nuche, garrapatas y mosca del ganado.
Por el gran impacto económico que tienen para los ganaderos las infestaciones de garrapatas y las enfermedades que estas transmiten, el control de garrapatas en ganado bovino es imprescindible y se puede llevar a cabo de varias formas.
Medicamentos para las garrapatas. El control químico de las garrapatas se realiza mediante sustancias acaricidas y medicamentos antiparasitarios, que se aplican mediante sistemas de aspersión, baños de inmersión e inyecciones. El problema con estos métodos es que hay cepas de garrapatas resistentes a los mismos, y que algunos provocan contaminación en el medio y en los derivados de los animales como la carne y la leche. (Lea en CONtexto Ganadero: ¿Sabe usted de qué depende la resistencia en las garrapatas?)
Además, los garrapaticidas en bovinos deben ser manejados con cautela, siguiendo las instrucciones del fabricante, para evitar daños o envenenamiento del ganado, del personal o el medio ambiente. Hasta el momento, los medicamentos para las garrapatas en bovinos con base en ivermectinas, abamectinas y amidinas han resultado bastante eficaces para garrapatas y ácaros de la sarna.
Control inmunológico. Se realiza mediante una vacuna que daña a la garrapata, impidiendo que esta ponga más huevos. Se acompaña durante las primeras dosis, con un estricto sistema de baños con acaricidas. No se debe utilizar en ganado bovino lechero este método, por el riesgo de que determinadas toxinas de la vacuna se transmitan a la leche.
Control biológico. Otra forma de lograr un control, aunque no inmediato, de las poblaciones de garrapatas es el control biológico. Las aves, hormigas y avispas, por ejemplo, son depredadores naturales de estos parásitos. Estos animales pueden ayudar a mantener el pasto libre de garrapatas, puesto que estas durante su ciclo de vida suelen ubicarse en lo alto de las hojas de hierba en la espera de un animal.
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