“Hay que volver la mirada a los territorios rurales”

Más de 40 Líderes de la Ruralidad de las Américas compartieron sus experiencias en un encuentro realizado del 16 al 20 de abril pasado, en la Sede Central del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), en Costa Rica, donde coincidieron con autoridades, técnicos del Instituto y representantes del sector privado, cuyos diálogos se centraron en temas sobre su entorno cotidiano, desarrollo sostenible, financiamiento, conectividad rural y cooperativismo, entre otros.

El encuentro reunió a 29 mujeres y 21 hombres de 21 países de las Américas. Por Colombia participó Liliana Jiménez, cultivadora de cacao y quien representa a ‘María del Campo’, imagen institucional del gremio cacaotero, Fedecacao.

Como conclusión de esa interlocución, tanto en sus giras de campo, como en las instalaciones del IICA, los Líderes de la Ruralidad participantes (reconocidos por el IICA por su aporte a la seguridad alimentaria y la protección ambiental en el hemisferio) decidieron hacer un manifiesto, al que llamaron ‘Declaración de los Líderes de la Ruralidad de las Américas’.

Esta, comprende 20 puntos donde plasmaron como preocupación creciente la seguridad alimentaria, nutricional y climática, así como las formas de producción, que deben ser cada vez más sustentables e inclusivas; igualmente, “resulta imperativo reconocer y valorar la decisiva contribución de la ruralidad en su conjunto, sus líderes y comunidades, que destinan conocimientos, recursos y esfuerzos para garantizar una adecuada oferta de alimentos.

También, refrendaron el compromiso de seguir siendo garantes de la seguridad alimentaria y nutricional, promotores del desarrollo sustentable y guardianes de la biodiversidad, procurando compartir experiencias exitosas y construyendo redes que eleven el potencial productivo y el bienestar rural en los países de las Américas.

Destacaron que la agricultura es parte de la solución a los desafíos de la agenda global, como el cambio climático y la seguridad alimentaria, lo mismo que el reto que representan la degradación de los suelos de uso agrícola y la gestión del agua, mientras que plantearon alternativas para superar tal desafío, entre ellas el desarrollo de la bioeconomía, la economía circular y los bioinsumos. A su vez, demandaron de los gobiernos políticas públicas que beneficien a la naturaleza, la agricultura y a los mismos productores rurales.

Los temas de la sociedad, las mujeres rurales y el relevo generacional, también quedaron relacionados en la Declaración. Por ello se pide el empoderamiento económico de las mujeres y visibilizar su importancia en las actividades agrarias y el desarrollo rural; en cuanto a los jóvenes se reclamó por brindarles opciones reales de desarrollo, fomentando su carácter de innovadores y emprendedores para así asegurar dicho relevo en los territorios.

Otra de las necesidades sentidas en la ruralidad, plasmada por los Líderes en su Declaración es la de democratizar el uso de las tecnologías de la información y la comunicación, fortaleciendo tanto las políticas públicas, como los vínculos con el sector privado; sin embargo, la incorporación de tecnologías digitales demanda superar el reto de la conectividad, pues se calcula que sólo 4 de cada 10 personas tienen conectividad en la ruralidad.

Las iniciativas y emprendimientos anotados requieren de financiamiento para mantenerlos, expandirlos y sean rentables, por lo que sugirieron el aporte de instituciones como el FIDA o la CAF, en particular con fondos dirigidos a comunidades rurales.

Por último, también incorporaron temas como el impulso al cooperativismo y otras formas de asociatividad y, en general, un llamado a autoridades de los sectores agrario, público y privado, así como a la sociedad civil y los parlamentos para lograr el bienestar de las comunidades.

El texto completo de la ‘Declaración de los Líderes de la Ruralidad de las Américas’: https://iica.int/es/prensa/noticias/volver-la-mirada-los-territorios-rurales-para-apalancar-procesos-de-desarrollo