Granjas urbanas, el furor de Nueva York

En Nueva York, las granjas urbanas se ponen en furor, pero esta vez desde las azoteas de la ciudad. Conozca los beneficios que le está trayendo esta nueva modalidad a toda la población neoyorquina.

Las fincas urbanas en las azoteas están en auge a nivel global, pero en Nueva York se han convertido en un furor, pues ofrecen a sus residentes una opción orgánica para tener los productos frescos. (Lea: Huertas caseras hidropónicas verticales llevan el campo a su casa)

Este tipo de granjas han aparecido en los paisajes no solo revitalizando barrios y espacios abandonados, sino también generando empleo. Además de reverdecer todo el lugar donde se plantan los cultivos.

La idea de este tipo de espacios es que se aprovechen de cada metro de estructura que se pueda encontrar dentro de la ciudad, de tal forma que se convierta en un lugar donde se puedan sembrar alimentos.

En Nueva York, existen varios casos de granjas a las alturas, es decir, conformadas en las azoteas de algunos edificios, de tal forma que la urbanidad se mezcle con la ruralidad y así poder ofrecer y consumir productos totalmente orgánicos.

En estos espacios, las tierras donde se realiza la siembra no son muy profundas, en algunos casos de algunas pulgadas. Este tipo de tierra es totalmente ligero, pues hay que tener en cuenta el peso que le puede generar al lugar, específicamente en sitios como las terrazas.

Estas granjas se han utilizado la el cultivo de varios productos como los pepinos, pimientos, tomates, zanahoria, remolacha lechuga, nabos, col rizado, berenjenas pues más que todo están enfocadas en las producciones de vegetales. (Lea: 7 soluciones e innovaciones que están transformando la agricultura)

El objetivo de estas granjas es que se provea a la ciudad de productos orgánicos, es decir, que no hayan tenido mucho recorrido de transporte y contaminación desde las fincas que se encuentran en las zonas rurales, hasta su llegada a los súper mercados de la ciudad.

Es por esto que estas nuevas herramientas se han convertido en algo novedoso, que no solo ayuda a la generación de empleos, sino que también genera grandes aportes al medio ambiente, en una ciudad como Nueva York, donde todo el día los factores contaminantes se están moviendo por el flujo de personas.

Las granjas urbanas se han considerado como un pulmón para las ciudades, pues en épocas como el verano, generan oxigenación en los lugares donde se encuentran así como a purificar el aire. Para las temporadas de invierno, también ayuda a reducir el frío dentro de los edificios.

Finalmente, estas grandes están teniendo buena acogida en toda la población neoyorquina, no solo por el aporte al medio ambiente, sino porque son alimentos saludables y orgánicos. (Lea: Huertas resilientes, una apuesta por la mitigación al cambio climático)

Fuente: CNN Español