Europa crea protocolo para detectar mal de vaca loca atípico

Se hicieron realidad las peticiones de algunos países sobre la necesidad de analizar con más detalle los casos de mal de vaca loca atípicos para evitar el comercio de productos contaminados que pongan en riesgo la salud pública.

La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria, EFSA, aseguró que se ha desarrollado un nuevo protocolo para analizar los casos atípicos de encefalopatía espongiforme bovina, EEB, con nuevos estudios y valoraciones que lleven a evitar que animales enfermos pasen a faena.

La información científica sobre la sintomatología de los casos atípicos del mal de la vaca loca son escasos, a diferencia de los episodios normales de la enfermedad que han permitido a médicos veterinarios, ganaderos y plantas de beneficio evitar que la carne de res con la patología se consuma. (Lea: Mal de la vaca loca pasó por Europa y Suramérica en este semestre)

Los casos atípicos son aquellos en los cuales la vaca no muestra un cuadro clínico coherente con la enfermedad normal, que se identifica por convulsiones en los animales.

Así es el protocolo

La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria determinó que el nuevo esquema de valoración de la EEB incluye el número de rumiantes por valorar para que los resultados sean significativos. Además la identificación de los tejidos que podrían alojar la enfermedad o indicar su presencia y los métodos que deben usarse para detectar al agente causal.

El protocolo anexa varios bioensayos y métodos in vitro que permitirán cuantificar la presencia de priones de EEB atípica en los tejidos bovinos.

La petición

Ismael Zúñiga, subgerente de salud y bienestar animal de Fedegán-FNG, manifestó que al no contarse con patrones claros de identificación de casos de mal de vaca loca atípicos pueden pasar desapercibidos con el riesgo de causar muertes humanas que consumen carne contaminada con la patología. (Lea: Fedegán analiza impacto en mercados por reaparición de 'vacas locas' en Europa)

Aseguró que Suramérica y Colombia harían bien en pedir a la Organización Mundial de Sanidad Animal, OIE, que se dé el mismo trato a los casos normales y atípicos de la EEB para evitar hechos que lamentar.

“Es de suma importancia que la OIE incluya los casos atípicos. Es bueno que las autoridades sanitarias de cada país planteen la idea para proteger la sanidad y el comercio y mercadeo de carne”, señaló.

Esperanza Polanía, coordinadora de seguimiento epidemiológico de Fedegán-FNG, dijo que Colombia tiene riesgo insignificante de mal de vaca local, el reconocimiento más alto que otorga la OIE a un Estado.