Recomendaciones para aprovechar oferta hídrica el resto del año

Los productores agropecuarios están a la expectativa de lo que ocurra en los próximos meses por la llegada de las lluvias que habitualmente inician en septiembre, aunque reconocen que el cambio climático ha hecho más complejos los pronósticos.   Mientras que unas zonas del país siguen sufriendo el embate del intenso verano que trajo el fenómeno de El Niño, hay otras en las cuales se incrementó en el régimen de lluvias. Incluso departamentos como La Guajira y Magdalena ya reciben aguaceros anhelados por los ganaderos.   Sebastián Alcalá, propietario de la finca Pivijay, ubicada en el corregimiento Tigreras de Riohacha, señaló que en los últimos días han caído algunas precipitaciones que han permitido la recuperación de los potreros.   “Estoy totalmente convencido de que las lluvias van a llegar porque el tiempo se ve diferente, el ambiente se siente distinto. Tengo la esperanza de que va a venir el agua a partir de septiembre, que siempre es la fecha en la que comienzan las lluvias por acá, en el norte de La Guajira”, indicó. (Lea: Terminó agosto y algunas regiones siguen secas a pesar de pronósticos)   Escuche las declaraciones del productor de La Guajira

En Magdalena también se ha observado un poco de alivio para los ganaderos con las lloviznas de últimos días. Carlos Enrique Farelo Pinzón, presidente del Comité de Ganaderos de Ariguaní, Coganar, reconoció que a pesar de que falta mucho para restablecer los potreros, ya comienzan a verse señales de mejoría.   “Ha estado serenando en distintos sectores y se están recuperando los pastos poco a poco. El problema que puede ocurrir si no continúa así es que otra vez los ríos se secan y el pasto se atrasa”, advirtió.   Asimismo, los jagüeyes han vuelto a sus niveles habituales. Según Farelo, el 85 % de los reservorios estarían llenos gracias a 2 fuertes aguaceros que cayeron en los últimos días. (Lea: Recomendaciones para trabajar con condiciones climáticas variables)   Para Mauricio Olaya, ganadero en el altiplano Cundiboyacense, el régimen de lluvias de los últimos años ha variado mucho debido a la complejidad del cambio climático, que ha alterado por completo las temporadas habituales de verano e invierno en el trópico.   “Por esa razón debemos aprovechar de septiembre a diciembre la oferta hídrica que venga, sea poca o mucha. Hay que recolectar el agua y sembrar comida para almacenarla en la época más caliente que viene a principios de cada año”, precisó.   El productor recomendó hacer un adecuado manejo de los suelos y establecer cosechas de forrajes y bancos de proteína con especies tolerantes a la sequía, con el fin de obtener materiales para hacer silos y henos. (Lea: En algunas regiones del país El Niño no ha terminado)   De otro lado, se deben restaurar y mejorar embalses, vallados, jagüeyes y cualquier otra estructura de almacenamiento del recurso hídrico. En predios que estén a más de 2.800 msnm se deben implementar atrapanieblas para capturar el recurso.   En fincas de trópico bajo, Olaya aconsejó renovar y subsolar suelos compactados, así como construir estructuras de bajo costo para dar sombra a los animales y así disminuir el consumo de agua. (Lea: Lluvias irregulares en el Caribe terminan afectando al sector)   “El descenso de la capa freática está directamente relacionado con la menor oferta hídrica y un bajo régimen de lluvias. Pero también inciden las inadecuadas técnicas de manejo, fertilización y riego”, anotó.   Para Olaya, si bien las condiciones futuras no son las más aceptables, la segunda temporada invernal del año se aproxima y hay que aprovechar el agua que caiga a como dé lugar.