Qué emergencias se pueden presentar durante el parto de una vaca y cómo tratarlas

A pesar que muchas vacas dan a luz sin problemas, existen situaciones de emergencia que pueden surgir durante el parto bovino. Por esta razón es fundamental que los ganaderos estén preparados para enfrentar estas eventualidades y actuar con rapidez para garantizar la salud tanto de la madre como del ternero.

En un documento elaborado por Fabia Viviana Fernández, doctora en medicina y tecnología veterinaria, existen tres etapas ben definidas en el parto de un bovino: dilatación del cérvix, nacimiento del ternero y expulsión de la placenta.

“La primera etapa dura de 2 a 3 horas en vacas adultas y de 4 a 6 horas en vaquillonas. El cuello uterino se dilata por acción de una hormona llamada oxitocina y por la presión de la bolsa de agua. En la segunda etapa el ternero avanza por el canal de parto ayudado por las contracciones uterinas. Es importante tener presente que esta etapa puede demorar de 2 a 10 horas y no siempre es bueno apurarse en ‘ayudar’”, explica la profesional.

Para la última etapa, la experta dice que es el momento en el cual la placenta es expulsada del útero. Esta acción debe llevarse a cabo dentro de las 12 y hasta las 25 horas del nacimiento. (Lea en CONtexto ganadero: Lo que sucede antes, durante y después del parto de la vaca)

Sin embargo, en el proceso también pueden ocurrir anomalías como las siguientes:

• Distocia: Puede deberse a varias razones como el tamaño inadecuado del ternero, una posición incorrecta o malformaciones. Cuando un bovino presenta signos de distocia como un parto prolongado sin avances, es importante intervenir de inmediato.

Para tratarlo, lo ideal es llamar a un veterinario para obtener asesoramiento, utilizar guantes limpios y lubricantes para examinar la causa del problema, y en casos graves, se puede requerir asistencia veterinaria para realizar una cesárea.

• Presentación anormal: Esto ocurre cuando el ternero no está posicionado correctamente para el parto, como en el caso de la presentación de patas traseras o una posición transversal.

Para su tratamiento en casos leves, el ganadero puede intentar reposicionar al ternero con las manos limpias y lubricante y si no hay progreso, se debe buscar de la asesoría de un veterinario para evitar lesiones tanto en la madre como en el ternero.

• Ternero grande: Un animal de gran tamaño puede dificultar el parto, especialmente cuando las vacas son pequeñas. Esta situación puede provocar distocia y aumentar el riesgo de lesiones tanto para la madre como para el ternero.

Para el tratamiento de esta situación se debe monitorear el progreso del parto, y en caso de distocia debido al tamaño del ternero, es necesario una intervención veterinaria.

• Prolapso uterino: Aunque es menos común, se puede presentar un prolapso cuando el útero se invierte y sale parcial o totalmente.

Un punto importante para el tratamiento de este prolapso es no intentar empujar el útero hacia adentro y llamar a su veterinario de confianza para la atención inmediata de la emergencia. (Lea en CONtexto ganadero: Antes, durante y después del parto de la vaca. Asistencia y casos especiales)

Para conocer más información sobre el parto de una vaca, puede ver el video elaborado por Fedegán que hace parte del Manual práctico ganadero.