¿Por qué aparecen y cómo tratar hematomas y úlceras solares por laminitis en bovinos?

Los hematomas solares corresponden a la tercera fase del proceso de desarrollo de la laminitis, en tanto que la úlcera solar corresponde a la fase cuatro. Estas lesiones en la suela, si se vuelven crónicas, pueden derivar en problemas más graves, por lo que debe corregirlas antes de que sea demasiado tarde.

El profesor Óscar R. Perusia Universidad Nacional del Litoral de Argentina afirmó que “las lesiones solares muy crónicas además de sobrestimular el crecimiento de la suela, por el dolor que produce, impide que apoye correctamente y evita su desgaste”.

En su artículo sobre patologías podales de bovinos, añadió que este tipo de alteración también suele aparecer en otros procesos crónicos en los que hay crecimiento exagerado con falta de desgaste. (Lea: 8 patologías digitales más comunes en ganado bovino)

Por otro lado, en el artículo “Pietín y bienestar de las vacas lecheras” del Sitio Argentino de Producción Animal se explica que la laminitis es una inflamación del corion, tejido que conecta las láminas con la pared de la pezuña del bovino.

En una primera fase, la vaca sufre una acidosis ruminal clínica o subclínica por la caída del pH que produce mortandad de bacterias. Estas liberan endotoxinas, que por vía sanguínea llegan a las uniones arteriovenosas del dedo del bovino y allí producen lesiones.

En la segunda fase, las endotoxinas lesionan las paredes de los vasos sanguíneos y se inflama el corion. En la laminitis aguda hay mucho dolor por compresión, pero no se observan lesiones externas. (Lea: Conozca las causas que predisponen a la deformación de las pezuñas)

Los hematomas solares aparecen en la tercera fase del proceso. Los exudados y la acumulación de sangre se exteriorizan como hematomas y generalmente son visibles al desvasar la suela. Se localizan en la cara solar de la suela hacia la punta o hacia el bulbo o talones.

El patrón de crecimiento de la pezuña es de 5 a 6 mm por mes, y la suela tiene un grosor de 10 a 13 mm; por dicho motivo la aparición del hematoma ocurriría a los 2 meses desde las lesiones primarias, esto es, la acidosis ruminal, y se observan en la línea blanca.

Los hematomas solares también pueden tener origen en causas externas como pisos de concreto en malas condiciones, por la presencia de piedras u otros objetos donde se golpea la suela, y esto puede ocurrir, sobre todo, en vacas de gran tamaño y sobrepeso.

La úlcera solar corresponde a la cuarta fase de la laminitis. El daño producido en el corion separa la tercera falange, que al rotar presiona la suela y se forma la ulcera de punta, y si apoya la parte posterior, la lesión estará en la planta cerca del bulbo.

La hormona relaxina, liberada durante el parto, puede jugar un rol debilitando los ligamentos suspensorios y ocasionando el hundimiento de la tercera falange, lo que aumenta la posibilidad de úlcera. (Lea: Prevenga las 3 clases de laminitis que afectan pezuñas de bovinos)

El artículo señala que si se diagnostican hematomas o ulceras solares, se debe a una acidosis ruminal. En este caso, además del tratamiento local, se deberá evaluar la alimentación de las vacas, que puede deberse a un exceso de carbohidratos no estructurales (granos) en la dieta.

La gravedad de la laminitis, y por ello el daño de las pezuñas, dependerá de la severidad de la acidosis, su duración y frecuencia. Por ello también es importante la utilización de aditivos en la dieta, como el antibiótico ionósforo monensina, porque ayuda a disminuir la acidosis ruminal.