Monitorear la rumia es clave para asegurar rendimiento del ganado

La rumia es un proceso digestivo esencial en los bovinos y otros rumiantes, que les permite extraer la mayor cantidad de nutrientes posible de su alimentación. En este proceso, los animales regurgitan el alimento previamente ingerido, lo vuelven a masticar y lo tragan de nuevo para ser digerido en el estómago.

En este artículo discutiremos en detalle cómo funciona el proceso de rumia en bovinos, los beneficios que aporta y por qué es importante monitorear este proceso para asegurar una buena salud y rendimiento del ganado, según lo dicho por el médico veterinario Carlos Alberto Fuentes, en diálogo con CONtexto ganadero.

Funcionamiento del proceso de rumia en bovinos

Los bovinos son animales rumiantes, lo que significa que tienen un estómago dividido en cuatro compartimentos: el rumen, el retículo, el omaso y el abomaso. “El rumen es el primer compartimento y es el lugar donde ocurre la mayor parte de la rumia” dice.

El proceso de rumia comienza cuando el alimento ingerido llega al rumen, donde se mezcla con los fluidos estomacales y se forma un bolo alimenticio. Luego, el bolo es regurgitado a la boca, donde los bovinos lo mastican repetidamente para romper las fibras del alimento y facilitar la digestión.

Durante este proceso, se estimula la producción de saliva, lo que ayuda a neutralizar los ácidos estomacales y a mantener un ambiente adecuado para el crecimiento de microorganismos que ayudan en la digestión del alimento.

Después de la masticación, el bolo es tragado de nuevo y pasa al retículo y luego al omaso, donde se eliminan los líquidos y se absorben los nutrientes. “Finalmente, el alimento digerido pasa al abomaso, que es el estómago verdadero, donde se produce la digestión química y se absorben los nutrientes”, explica Fuentes.

La rumia puede ocurrir varias veces al día, dependiendo del tipo de alimento y de la edad del animal. Los bovinos pueden pasar hasta ocho horas al día rumiando, lo que les permite extraer la mayor cantidad de nutrientes de su alimentación y mantener un sistema digestivo saludable.

Beneficios de monitorear el proceso de rumia

El monitoreo del proceso de rumia en bovinos es importante por varias razones. En primer lugar, puede indicar si el animal está ingiriendo suficiente alimento y si está digiriéndolo correctamente. La falta de rumia puede ser un signo de enfermedad o de problemas digestivos, lo que puede afectar negativamente el crecimiento y la producción del ganado.

Además, “el monitoreo de la rumia puede ayudar a identificar animales que tienen una menor eficiencia alimenticia, lo que puede ser una señal de problemas de salud o de nutrición.” Si se identifican estos animales a tiempo, se pueden tomar medidas para mejorar su dieta y su salud, lo que puede aumentar su rendimiento y reducir los costos de alimentación.

El monitoreo de la rumia también puede ayudar a prevenir la acidosis ruminal, una afección en la que los niveles de ácido en el rumen aumentan a niveles peligrosos. La acidosis ruminal puede ser causada por una dieta inadecuada o por cambios repentinos en la alimentación, y puede tener.