La ecografía bovina ayuda a planear el parto de la cría

La importancia de esta práctica recae en que da un diagnóstico definitivo y no presuntivo. Conozca qué puede conseguir con esta herramienta en beneficio de su predio ganadero.   La ecografía en bovinos es una técnica en la que se emplea ondas de sonido de alta frecuencia para producir imágenes de los tejidos blandos y órganos internos, las cuales se pueden visualizar en la pantalla del ecógrafo.   Gracias a esta práctica, el productor ganadero podrá conocer el estado del semoviente, dándole así la seguridad de aplicar métodos o acciones a futuro en el hato.(Lea: Claves para garantizar la preñez bovina con inseminación artificial)   De acuerdo con Jorge Daniel Ferrario, socio fundador de la empresa argentina Ecografías Bovinas, este examen del sistema reproductor bovino es altamente eficiente en la evaluación útero-ovárica y permite una valoración confiable de la dinámica de las ondas foliculares.   “Con esta práctica, además, se conoce el diagnóstico precoz de la gestación, la identificación del sexo de la cría y la observación de los procesos patológicos principales de los órganos de la reproducción, entre otros usos”, añadió Ferrario.   Su mayor impacto consiste en la realización de una evaluación precoz y de claustro materno, principalmente a partir del día 23 de gestación, lo cual le permite al productor incrementar la eficiencia reproductiva y programar las fechas de partos. (Lea: La edad de la primera monta)   Según Óscar Giraldo Gómez, gerente general de la empresa Preñar Eurogenética y médico veterinario zootecnista, esta herramienta, con el paso de los días, se ha vuelto una aliada para el desarrollo del sector.   “Gracias a esta técnica el productor bovino puede hacer un muy buen diagnóstico de sus semovientes, porque es mejor trabajar de una manera exacta en los animales, acotó Giraldo Gómez.   Es importante tener en cuenta que la persona que realice esta técnica en las reses, debe conocerla a profundidad, para que los resultados sean óptimos. (Lea: Extracción de semen se podría hacer desde los 5 meses en terneros)   Debe practicarla un médico veterinario con conocimientos avanzados en imagenología y en interpretación de imagen diagnóstica que haya sido entrenado en ecografía, porque introducir el ecógrafo es sencillo, pero es necesario tener un conocimiento avanzado en anatomía, fisiología y gestación, para que lo que se vea en la pantalla sea bien interpretado.   Existen dos clases de ecógrafos: los portátiles, que le permiten al ganadero llevarlos a cualquier parte porque no son más grandes que una tablet, y los estacionarios. De igual forma, hay dos formas básicas de uso: la transrectal, con fines de diagnóstico reproductivo, y la transvaginal, que es para aspiración folicular   Por consiguiente, es importante que el ganadero que quiera realizar la ecografía bovina en su predio, lo haga de la mano de un profesional que conozca a profundidad del tema, pues de lo contrario, no tendrá avances positivos sino que encontrará trabas en su desarrollo.