La Catira, primera empresa láctea del país cero deforestación

En Cumaral (Meta) se encuentra La Catira, la primera empresa láctea cero deforestación de Colombia, proceso que llevó tres años para lograrlo.

Según la gerente de la compañía, Sandra Valero, este es un modelo que se quiere replicar en otras pequeñas industrias lácteas del país que consiste en cómo ser sostenibles a través de procesos de desarrollo económico, ambiental y social.

“Ahora tenemos que trabajar unidos productor-transformador para enfrentar todos esos desafíos que se nos vienen en los temas del TLC porque van a llegar muchas leches importadas más baratas y debemos empezar a ver cómo producimos para competir”, afirmó la directiva.

Recordó que vienen trabajando con el programa de desarrollo de proveedores desde hace tres años que es un modelo de encadenamiento productivo donde se han articulado estrategias como crear la Asociación de Proveedores de La Catira.

Así mismo se propusieron trabajar con la red de proveedores en los acuerdos de cero deforestación y durante estos tres años se dedicaron a verificar que todas las fincas cumplieran con esta condición. (Lea en CONtexto ganadero: Lecheros comprometidos con los acuerdos de cero deforestación)

El sábado pasado se hizo una reunión de informe del programa, viendo los avances y con la información de cero deforestación validada, La Catira es la primera empresa láctea del país que cumple con dichos acuerdos. En el encuentro estuvo el alcalde de Cumaral, representantes del proyecto Biocarbono Orinoquia, la Fundación Proyección Ecosocial y Fedegán del Meta.

El proceso

El primer proceso fue articularse con el proyecto Biocarbono Orinoquia, donde tienen un programa de reducción de emisiones y lo que se debe garantizar es que hay cero deforesteción. Así mismo, el Ministerio de Ambiente lidera unos acuerdos público-privados de cero deforestación, donde se reúnen las empresas firmantes quienes garantizan que la cadena de suministro proviene de zonas libres de deforestación.

En 2021 La Catira firmó dicho acuerdo y empezaron a trabajar. La Gobernación del Meta los ayudó con la validación de polígonos, es decir, ir a las fincas, levantar información y con ella se ingresaba a una plataforma que la lidera la Fundación Proyección Ecosocial y esa plataforma lo que hace es ver los mapas de cobertura de acuerdo a imágenes satelitales y a otras plataformas validadas por el Ideam.

En esta plataforma se ve cuántas hectáreas se tienen en bosques, así como en potreros, si hay humedales, y si tiene áreas deforestadas, teniendo en cuenta que la deforestación se cuenta desde el año 2010. Igualmente se revisa si están en zonas de páramos o de interés étnico. Esa plataforma hace toda la determinación ambiental.

En estos tres años se hizo la validación de la información y ahora el Ideam realiza lo propio para que posteriormente les entreguen el sello de confianza de que la empresa es cero deforestación. (Lea en CONtexto ganadero: Comienza círculo de excelencia con ganaderos de Cumaral)

Para qué sirve

El sello cero deforestación es un aval de que la empresa trabaja la sostenibilidad ambiental, “que nos preocupamos no solo por extraer recursos sino que también aportamos en el cuidado del medio ambiente”.

Es poder mostrar cuántas hectáreas se tienen para restaurar y se han restaurado, para implementar sistemas silvopastoriles. Muchos de los proveedores haciendo su planificación predial ven que pueden liberar unas hectáreas de ganadería para conservación. Unirse con un vecino y hacer rondas de protección de caños.

Lo primero es garantizar técnicamente que los ganaderos (proveedores) le apuestan a la no deforestación y todo este tema ambiental es clave a la hora de implementar la ganadería sostenible. Además, es una ventaja competitiva porque al ser los primeros va a animal a otros a seguir ese mismo camino y a trabajar en encadenamientos productivos.

Por el momento no se espera que haya un mayor precio por ser productos cero deforestación debido a que la situación es bastante compleja y lo que se está mirando es cómo ser más productivos a lo largo de la cadena, con menos recursos optimizando los costos de producción. (Lea en CONtexto ganadero: La Catira tiene el primer predio escuela de ganadería sostenible)

El panorama es seguir tratando de diferenciar a las pequeñas industrias locales de la gran industria y del mercado informal por eso “estamos haciendo el modelo Catira para las pequeñas industrias lácteas locales del país, cómo ser sostenibles a través de procesos de desarrollo económico, ambiental y social”.