¿Hace usted una planificación de alimentos o solo gasta en lo que cree que el ganado necesita?

“Yo noto que la gente sale a comprar alimentos para sus bovinos a diestra y siniestra, pero sin pie ni cabeza. Es decir, se invierte en sembrar especies porque la semilla es barata, pero no se piensa en que al ganado hay que ofertarle proteína y energía”, dice Enrique Rimbaud, médico veterinario.

Esto quiere decir, agrega, que hay una tendencia entre los productores a comprar alimentos sin considerar adecuadamente sus necesidades nutricionales.

En este caso puntual, el afán que tiene el productor por brindarle un alimento al animal hace que no analice cuáles son las ventajas y desventajas de esa especie vegetal, además de los aportes que hace a la nutrición del bovino.

Esta es la razón por la cual el profesional menciona que “el productor tiene que planificar cuáles son los requerimientos de proteína y energía que tienen los animales. Una vez se haga esto, es importante organizar los números y las cuentas para evaluar si la especie vegetativa le sirve o no le aporta”.

Hay que tener en cuenta que los bovinos son animales que necesitan energía para su desarrollo, para ser más exactos requieren de 1.74 megacarolorias por día, siendo esta la razón por la que hay que buscar un pasto que supla esta necesidad. (Lea en CONtexto ganadero:Haga una planificación en su finca basado en estas fases)

De acuerdo con Rimbaud, “el productor tiene que hacer un análisis de costos para saber hasta dónde se invierte en proteína y energíapara que salga rentable”.

Todo esto, teniendo en cuenta que para nadie es un secreto que producir leche y carne basado en concentrado es una opción muy costosa en el mundo de hoy, debido a que el costo de los insumos es muy elevado.

Una de las principales consideraciones en la planificación de la alimentación del hato es evaluar las necesidades nutricionales de los animales en función de su edad, peso, estado fisiológico y nivel de calidad.

Esta es la razón por la que antes de gastar en alimento, el productor debe tener en cuenta la disponibilidad y calidad de los recursos alimenticios disponibles en la finca. Esto incluye evaluar la cantidad y calidad de los pastos, forrajes, granos y suplementos disponibles, así como su contenido nutricional y su capacidad para satisfacer las necesidades del hato. (Lea en CONtexto ganadero: 5 pasos para elaborar un plan estratégico para la actividad ganadera)

En el contexto de cambio climático mundial es fundamental que el productor evalúe las condiciones climáticas y ambientales al momento de hacer una planificación de la alimentación. Todo esto, debido a que se ha demostrado que factores como la temperatura, la humedad y la disponibilidad de agua pueden afectar significativamente el consumo y la digestibilidad de los alimentos por parte del ganado.

Finalmente, Rimbaud dice que “antes de comprar algo, el productor debe tener claro qué alimentos dar o qué alimentos no debe darles a sus animales”.