Ganadero redujo a la mitad sus costos de producción. Conozca cómo lo hizo

El sistema de forraje hidropónico del ganadero argentino no solo garantiza el bienestar de su ganado lechero, sino que también reduce significativamente los costos operativos hasta en un 50%, señala el portal AgrofyNews.

El ingenioso método -que implica cultivar forraje sin suelo- tiene el potencial de ahorrar vastas extensiones de tierra cultivable.

Producción de forraje hidropónico

Este sistema de cultivo que se utiliza para producir alimento vegetal, generalmente destinado al ganado, sin necesidad de tierra. En lugar de cultivar plantas en suelo tradicional, el forraje hidropónico se cultiva en bandejas o estructuras que sostienen las semillas y permiten su crecimiento en un ambiente controlado, donde el agua y los nutrientes esenciales son suministrados directamente a las raíces de las plantas. Este método permite un crecimiento rápido y eficiente de forraje verde y nutritivo, lo que lo hace especialmente adecuado para la alimentación de ganado, ovejas, cabras y otros animales.

La estructura del forraje hidropónico del ganadero argentino

Barbaresi creó una estructura mediante un galpón de 12 metros de ancho por 30 metros de largo, con una altura de 3.25 metros. Dentro de esta estructura, este ganadero perfeccionó la producción de forraje verde y nutritivo sin la necesidad de sustrato, utilizando bandejas diseñadas para retener la humedad necesaria para el crecimiento óptimo. El sistema presenta dos ventajas significativas: rapidez y volumen, permitiendo la producción ágil de grandes cantidades de forraje de alta calidad.

Según Dardo Barbaresi, por cada kilogramo de semillas utilizado obtiene seis kilogramos de forraje hidropónico. Además, ha diversificado la operación al experimentar con cultivos como el trigo, que solo necesita ocho días para crecer, uno en agua y siete en las bandejas, lo que resulta en un rendimiento diario de **entre 3,500 y 4,000 kilogramos.

"Reemplacé la soja por forraje hidropónico, que es un 50% más barato. Es un ahorro significativo, pero las vacas solo pueden consumir hasta un 40% de forraje hidropónico en su dieta**, el resto se complementa con fibra, silo de maíz y alfalfa. Nuestra idea, ahora que estamos establecidos, es expandirnos y aventurarnos en un nuevo negocio: un corral de engorde con forraje hidropónico. Si conseguimos los fondos, nos gustaría criar machos Holando utilizando esta técnica", compartió Barbaresi.

La historia del ganadero y la producción de leche en Argentina

Dardo Barbaresi comenzó su carrera en la agricultura y la ganadería a la edad de 14 años, trabajando junto en la finca de su familia, centrada principalmente en la producción lechera. Su padre y abuelo se habían dedicado a la industria lechera, y más tarde, un familiar se aventuró en el negocio, lo que inspiró a Barbaresi a especializarse en este campo.

"Esta es una explotación pequeña. Mi padre solía arrendar tierras adyacentes, y ahora soy propietario del 15% de la propiedad, con el resto alquilado", explicó Barbaresi a Agrofy News. También señaló que la ganadería lechera tiene sus altibajos, pero el sector ha permanecido estancado durante bastante tiempo. A pesar de un aumento sustancial en su producción diaria de leche, de 1.500 a 5.300 litros, el precio de venta aún se mantenía cerca del costo de los insumos, lo que resultaba en una rentabilidad mínima incluso con sólidas cifras de ventas.

Alimentar a las vacas a menudo resultaba más costoso que los ingresos que generaban. Además, la feroz competencia con cultivos como el maní en su región conducía a precios exorbitantes de alquiler de tierras.

Impulsado por el deseo de reducir sus requisitos de tierra e inspirado en la investigación y las experiencias de otros, Barbaresi decidió sumergirse en el mundo del forraje hidropónico. Esta técnica innovadora prometía mantener sus operaciones ganaderas en menos tierra. El proyecto despegó hace tres años cuando compró un módulo hidropónico pequeño fabricado en Argentina y lo instaló en un galpón con el objetivo de producir pasto para alimentar a 200 vacas al día.

Sin embargo, este proyecto no solo es un testimonio de ingenio sino también un desafío financiero. En la actualidad, producen aproximadamente de 3.6 a 3.7 toneladas de pasto hidropónico al día, pero la instalación tiene el potencial de llegar a 6 toneladas diarias. Además, han diseñado un sistema de cintas transportadoras para mover las toneladas de pasto dentro del galpón, un trabajo que, de hacerse manualmente, requeriría una cantidad significativa de tiempo y esfuerzo.