Experto español ofrece argumentos para defender a la ganadería de los “ambientalistas”

En la era actual, donde la preocupación por el medio ambiente y la sostenibilidad se ha convertido en un tema central, la industria ganadera ha sido objeto de intensos debates y críticas. Sin embargo, es crucial abordar estas críticas con argumentos sólidos y basados en evidencia para defender adecuadamente la importancia de la ganadería en la producción de alimentos y su papel en la economía global.

El ingeniero agrónomo Fernando Estellés Barber, quien ha contribuido significativamente al análisis de la industria agrícola y ganadera, ha desafiado algunos de los mitos y percepciones erróneas que rodean a la ganadería e hizo parte del documental ‘Goodbye cows’ que relata las dificultades que enfrentaría el mundo sin la ganadería.

Mediante una conversación en vivo con Fedegán, a través de redes sociales, en la que más de mil trescientas personas se conectaron, el ingeniero ofreció argumentos clave para defender la ganadería frente a los ataques más comunes:

Una dieta basada en vegetales no es más saludable

De acuerdo con Estellés, es crucial reconocer que las dietas basadas únicamente en vegetales pueden no ser adecuadas para todos los seres humanos. Estudios médicos han demostrado que las dietas veganas pueden carecer de ciertos nutrientes esenciales, como proteínas de alta calidad y hierro biodisponible, que son abundantes en los productos de origen animal. Además, la afirmación de que la carne es perjudicial para la salud no está respaldada de manera concluyente por la investigación científica, y hay estudios que sugieren que un consumo moderado de carne puede ser beneficioso para la esperanza de vida.

La ganadería ha hecho uso de suelo que no podría ser aprovechado por otras industrias

La crítica sobre el uso ineficiente del suelo para la ganadería debe ser contextualizada. Es importante destacar que gran parte de las tierras utilizadas para la ganadería son terrenos que no son adecuados para la agricultura o para otras industrias debido a su topografía o características del suelo. Además, la afirmación de que los vegetales destinados a la alimentación del ganado podrían ser utilizados para el consumo humano es refutada por estudios que indican que la mayoría de los alimentos consumidos por los animales son recursos que no son aptos para el consumo humano.

La ganadería no ha sido la única culpable de la deforestación

Si bien se ha culpado a la ganadería de la deforestación, esta afirmación es cuestionable y requiere una evaluación más detallada. La relación entre la ganadería y la deforestación no es directa ni única, ya que otros factores, como la expansión de la agricultura de cultivos como la soja, también contribuyen significativamente a la deforestación.

La cantidad de agua que consumen las vacas no sería tan alta como lo han indicado

El argumento sobre el consumo excesivo de agua por parte de la ganadería también debe ser examinado con cautela. Según el ingeniero, gran parte del agua utilizada para el ganado proviene de fuentes naturales, como la lluvia, y no contribuye a la escasez de agua potable. Además, la ganadería puede desempeñar un papel positivo en la preservación de la biodiversidad cuando se practica de manera sostenible y se integra en sistemas agroecológicos, como los sistemas silvopastoriles, que promueven la coexistencia de pastizales y árboles, beneficiando así al ecosistema.