¿Existe una raza recomendada para comenzar el negocio ganadero?

La pregunta sobre si existe una raza bovina ideal para comenzar en la ganadería es una de las más frecuentes entre los productores que desean incursionar en esta actividad. Sin embargo, la respuesta es contundente, no existe una raza bovina idónea que sea universalmente adecuada para todos los predios y sistemas productivos. (Lea en CONtexto ganadero: Cómo iniciar en ganadería sin fracasar en el intento)

En cambio, existen razas que se adaptan mejor a determinadas condiciones ambientales, objetivos productivos y prácticas de manejo, lo que implica que la elección de una raza debe fundamentarse en un análisis técnico y no en recomendaciones de terceros o tendencias locales.

Mariana Flandes, ganadera licenciada en Creación y Desarrollo de Empresas con maestría en Negocios Agroalimentarios, explica que “más que preguntar cuáles son las razas recomendadas para empezar en la ganadería, lo que realmente se debe analizar es en qué región se encuentra ubicado el predio, cuál es el tipo de mercado que pretende atender el ganadero, entre otros aspectos”.

Esto quiere decir que la selección de la raza adecuada no depende únicamente de las características intrínsecas del animal, sino también de una evaluación integral del entorno y de las metas del ganadero. Existen unos elementos principales que se pueden tener en cuenta al momento de considerar la elección de una raza bovina:

Condiciones ambientales del predio: Cada raza bovina tiene una capacidad distinta de adaptación a las condiciones climáticas y geográficas. Un análisis del clima, el tipo de suelo, la disponibilidad de agua y la calidad del forraje es fundamental para determinar qué razas pueden adaptarse mejor al entorno.

“Por más que el ganadero quiera tener la mejor raza porque se ve estéticamente bonita y porque cree tiene muchos beneficios, la realidad es que puede que no funcione para la región en la que se tiene el predio y no rinda en productividad como quiere”, describe la experta.

Objetivos productivos: El anterior aspecto va ligado a los objetivos productivos que se fije el ganadero al iniciar con el trabajo en campo. Una vez tenga la disposición para incursionar en la ganadería, los productores deben definir claramente si su objetivo es la producción de carne, leche o un sistema doble propósito, ya que esto influirá en la elección de la raza.

Adaptación genética: Hay que tener en cuenta que no todas las razas tienen la misma capacidad de adaptación a condiciones adversas. Las razas criollas y autóctonas, por ejemplo, han desarrollado resistencia genética frente a enfermedades locales y estrés ambiental, convirtiéndolas en una opción valiosa en sistemas extensivos de bajo insumo.

Mercado y visibilidad económica: La elección de una raza también debe alinearse con la demanda del mercado local. Por ejemplo, si el mercado prioriza carne magra de calidad, una raza como Angus podría ser una elección acertada. En cambio, si el mercado demanda leche, la holstein podría ser más adecuada.

Según Flandes, “hay que escoger animales que sea aptos para el negocio, la finca y para lo se está buscando con los objetivos de la ganadería, ya que esto nos va a ahorrar muchos dolores de cabeza, pérdidas de dinero y tiempo, que son elementos fundamentales en ganadería”. (Lea en CONtexto ganadero: Estas son las 7 mejores razas de ganado de carne en Colombia)

@marianaflandes Respuesta a @Joe Trujillo Mandru ♬ sonido original - Mariana Flandes