Crianza artificial, modelo para tener vacas élites

Un modelo de crianza de terneras con corral individual le ha permitido a la ganadería Hato Grande tener vacas élites, ganadoras de diferentes concursos.

En una charla del Zootecnista Leonardo Montoya, propietario de dicha ganadería y miembro de Asoholstein, señaló que en estos momentos manejan un programa intensivo de mejoramiento genético por medio de transferencia de embriones in vitro de las vacas élite. 

Indicó que para tener un programa bien estructurado en una ganadería se necesita tener unas bases genéticas muy importantes por eso tienen tres líneas de sangre de vacas ganadoras y con eso empezaron su programa genético. (Lea: Mejoramiento genético debe tener en cuenta el cambio climático)

Después que empezaron el programa genético han trabajado intensamente con transferencia de embriones in vitro y llevan alrededor de diez años haciendo embriones con su ganadería. “Hoy la mayor parte de nuestras vacas son por transferencia de embriones, hemos avanzado a pasos agigantados”, señaló.

Desde el momento que se hace una transferencia de embriones se tiene que evaluar desde la base genética de las vacas, los toros que se van a utilizar, que todo se acople a las condiciones que se necesitan y se buscan. “Para lograr ese animal ideal hay que evaluar muy bien las líneas de sangre y todo lo que se está haciendo”, manifestó Montoya.

El proceso

El ganadero explicó la forma como se lleva a cabo el proceso de crianza de las terneras, aclarando que el preparto es la base de todo. Allí se debe tener en cuenta el tiempo de secado (60 días), la recuperación de la glándula mamaria, la importancia de la calidad del calostro, y la dieta balanceada y preparación de la vaca. (Lea: 5 estrategias que llevan al éxito en la crianza de terneras)

Aseguró que “si no se tiene un buen preparto no se tiene una buena calidad de calostro, ni un animal en buena condición, van a nacer terneras muy débiles”.

Al momento de nacimiento siempre se suministra calostro durante las primeras seis horas cuatro litros por ternera, se hace limpieza de las fosas nasales y curación del ombligo para evitar entrada de patógenos.

Después de las primeras seis horas de vida evalúan las terneras, que tengan ojos limpios y brillantes, orejas levantadas y apuntando hacia adelante, nariz húmeda, respiración lenta y relajada, apetito y heces normales, pelaje brillante.

Si se tiene una buena ternera con una genética élite de ahí parte la crianza y todo el futuro del animal, explicó. (Lea: En 2020 se cumplen 30 años de la modificación genética en bovinos)

A partir de ese momento viene la crianza artificial donde se tiene un corral para cada ternera que están al aire libre, con buena ventilación pero protegidos del viento y de la lluvia, cama con buen sustrato, y en general las mejores condiciones para el crecimiento de las terneras.

Los corrales individuales cambian de tamaño en la medida en que los animales van creciendo pero empieza con uno de 1,50 x 1,50 en los primeros 15 días y después se pasan a uno de 3 x 3 garantizando que el bienestar animal. (Lea: Conozca qué tipo de corrales debe tener su finca basado en su sistema productivo)

Sostuvo que la crianza individual garantiza el consumo de leche de cada ternera con el consecuente efecto en ganancia de peso  y se puede identificar más rápido los animales enfermos que cuando están en grupo.

Los objetivos de la crianza artificial son los de lograr bajas tasas de mortalidad; reducir el tiempo de evolución del ternero monogástrico al rumiante; crianza de futuras novillas; incorporar animales de alto nivel genético, con buena producción; y, manejar un hato cerrado.

El suministro de leche durante 90 días empieza con 4 litros diarios en la primera semana, luego se pasa a 6 litros en las segunda y tercera semana y se llega a 8 entre las semanas 4 a 8 para luego empezar a bajar a 6 en las semanas 9 y 10, a 4 en la semana 11 y 2 en la 12.

En cuanto al consumo de materia seca se le da heno a partir del primer mes y concentrado y agua desde la semana uno. Una ternera se come alrededor de media paca de heno al día entre el primero y segundo mes y al momento del destete ya está en una paca diaria, señaló el ganadero. (Lea: Requerimientos de consumo de materia seca de los bovinos)

Para evaluar la ganancia de peso se hacen pesajes quincenales y mensuales.

En el caso de terneras de leche el promedio de ganancia diaria es de 1.035,7 gramos, en las de levante de 1.185,4 y en las novillas de levante de 1.371,4 ramos, para un promedio de 1.197,5 gramos. Al momento del destete pesa en promedio 115 kilos.

El destete se realiza a los 90 días y las terneras se van a potrero, a un programa de socialización. Se debe garantizar el consumo de 3 kilos entre concentrado y alfalfa, con consumo de heno y sal mineralizada a voluntad.

La novilla que llega a 400 kilos la están preñando, evaluando su condición corporal. Se usa solo semen sexado en novillas incluso se están preñando vacas con este mismo sistema.