Control natural de plagas, una propuesta de estudiantes lasallistas

análisis sobre el impacto de cultivos asociados en control de plagas presentando sus resultados en el VI Encuentro Institucional y I Internacional de Semilleros de Investigación.   Los cultivos asociados o consorciados son una práctica en agricultura que consiste en la combinación de dos o más especies de plantas en el mismo espacio de suelo o terreno. Esta técnica, a pesar de ser poco utilizada por muchos productores, es una excelente forma de controlar plagas. (Lea: 3 métodos para controlar ecológicamente las plagas)   “En nuestro proyecto de investigación el cultivo principal es el frijol y este lo asociamos con el maíz y ajonjolí dando como resultado que la ocurrencia de insectos plaga es menor que la de los monocultivos, ya que entre los tres se complementan aumentado así la producción por área cultivada”, comenta Joan David Bolívar, integrante del semillero SICELE.   Antes de definir las semillas que van a compartir el mismo suelo se debe estar seguro de que no generen competencia, si no, que desarrollen sinergia para su auto mantenimiento. En este caso, el tallo del maíz proporciona una estructura para que trepe el frijol, mientras que éste mejora la fijación de nitrógeno que también beneficia al maíz y el ajonjolí atrae a insectos predadores que se comen a los insectos plaga.   “Con este método de control ayudamos a cuidar el medio ambiente, ya que no utilizamos insecticidas que contaminan los suelos, ampliamos la producción por área y mejoramos la economía de la región”, explica Guillermo Alfonso Torres, miembro de SICELE y uno de los líderes de la investigación. (Lea: Organismos benéficos para el manejo de las plagas)   De esta forma los estudiantes de Ingeniería Agronómica investigan maneras de mejorar los cultivos de forma natural con principios ecológicos para mejorar la sostenibilidad de los agroecosistemas y la eficiencia de producción dando como resultado productos libres de químicos y 100 % orgánicos.