¿Qué dicen los índices reproductivos en una ganadería, más allá de las metas tradicionales?
PorCONtexto ganadero-29 de Octubre 2024
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Por - 01 de Marzo 2023
Existen infinidad de razones por las cuales se escogen o se descartan bovinos en una finca. Sin embargo, CONtexto ganadero le va a explicar cinco reglas que debe seguir al momento de hacer el descarte.
Deshacerse de animales, enviarlos al matadero o sacarlos de sus fincas es una tarea que solo los ganaderos conocen, dependiendo el objetivo que tenga en su predio y el manejo que le brinde al mismo. Enviar a los animales de forma oportuna a los frigoríficos es una decisión inteligente que muy pocas personas la toman en el momento indicado.
De acuerdo al portal Dairexnet, la exigencia del consumidor de hoy en día tiene el mayor efecto en la demanda de carne de res. Por lo tanto, los animales deben ser descartados y destinados al matadero tan pronto como sea posible o como sea visible los problemas como los que se presentarán a continuación.
El cáncer de ojo, las cojeras severas, las vacas lesionadas o postradas, las cojeras con heridas, los abscesos visibles y otras infinidades de enfermedades son las que pueden ser determinantes para que el ganadero tome la decisión de descartar un animal. (Lea: Aprenda cómo escoger o descartar una receptora)
Hay que tener claro que, si las vacas no se descartan oportunamente, en el caso de la lechería, esta se arriesga a perder el 100 % del valor de esa vaca si se condena su carcasa. Por lo tanto, los animales deben ser descartados y destinados al matadero lo más pronto posible, antes que su aspecto de salud progrese a etapas avanzadas y no sean elegibles para destinarlos al matadero.
Para que esto no suceda, el productor debe asegurarse de seguir estas cinco reglas de oro al momento de descartar animales:
Para el caso de las vacas lecheras, también existen unos criterios mencionados por el portal zootecnia y veterinaria y unas posibles candidatas que hay que analizar:
Las vacas con producción láctea por encima del promedio del hato pueden ser inseminadas hasta los 6 meses posparto. De no presentar celo o salir preñadas, se continua el ordeño hasta el final de la lactación debiendo ser eliminada cuando la producción no sea rentable. (Lea: “Si quieres mejorar...no te canses de descartar", ganadero del Magdalena Medio)
Vacas que están en el 20% inferior del rebaño o con lactaciones muy cortas no deben ser inseminadas, sino que hay que eliminarlas al final de la lactación o cuando ya no sean rentables.
Eliminar vacas con servicios repetidos.
Eliminar vacas con mastitis crónica, la cual alarga el intervalo parto-concepción.
Eliminar animales que no contribuirían a mejorar el nivel genético del rebaño.
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