Conozca los errores frecuentes en vacunación de aftosa y cómo evitarlos

La efectividad de las vacunas puede verse comprometida por prácticas inapropiadas durante el proceso de vacunación. Evitar la mala praxis en el proceso de vacunación es fundamental para asegurar que los animales reciban la protección necesaria. (Lea en CONtexto ganadero: Vea una guía de plan básico de vacunación para cuidar la salud de sus animales)

Jesús Amaru Villamizar Rodríguez, médico veterinario, explica una serie de errores que se cometen en la vacunación contra la fiebre aftosa:

1. Frascos de vacuna sumergidos en agua: Este es uno de los errores más comunes en el manejo de vacunas. Este error puede ocurrir tanto en el almacenamiento como en el transporte de las vacunas. El agua puede penetrar en los frascos a través de pequeñas fisuras o de los tapones de goma, comprometiendo la esterilidad del contenido. De acuerdo con Villamizar Rodríguez, “los frascos deben estar siempre en posición vertical para evitar que el agua entre el interior de la vacuna”.

2. Choques térmicos: Las vacunas contra la fiebre aftosa son sensibles a las variaciones de temperatura. Los choques térmicos, causados por cambios bruscos en la temperatura, pueden degradar los componentes activos de la vacuna. Según Villamizar Rodríguez, “no se debe tomar la vacuna con el puño de la mano, sino por el cuello para evitar que la temperatura corporal incida sobre la temperatura de la vacuna”.

3. Uso de frío por ambos lados de la manga: En algunos sistemas de vacunación, se emplean mangas de contención para administrar las vacunas a los bovinos. Una mala práctica común es aplicar frío por ambos lados de la manga. Villamizar Rodríguez menciona que, “para evitar el traspaso de vacuna de un lado a otro. De esta forma se evitarán alteraciones en la cadena de frío”.

4. Aplicación de vacunas en zonas llenas de heces: La higiene es fundamental durante el proceso de vacunación. La aplicación de vacunas en zonas contaminadas con heces aumenta el riesgo de infección y reduce la efectividad de la inmunización. El profesional expone que esta práctica, “nos genera la formación de absceso. La forma correcta es inocular el biológico en una zona aséptica limpia”.

5. Reutilización de vacunas: Otra práctica inapropiada es la reutilización de vacunas que se han utilizado en inmunizaciones anteriores. Las vacunas están diseñadas para usarse en una sola aplicación, y su reutilización puede disminuir su efectividad. Villamizar Rodríguez describe que “hay que evitar utilizar vacunas que se han implementado en programas de inmunización anterior debido a que pierden su potencia. Lo mejor sería utilizar vacunas nuevas para que el proceso de vacunación sea más eficiente”. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca los 9 tipos de vacuna que se deben aplicar al ganado)

@amarucapi

vacunación anti aftosa

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