Conozca cómo debe ser la selección por biotipo y aptitud funcional

En el proceso de mejoramiento genéticos llevados a campo por medio de distintos programas, entra en juego un momento muy importante y es la selección por biotipo y aptitud funcional. Conozca de qué se trata.

Efraín Antonio Coutiño Torres es un médico veterinario mexicano que indica que esto en cierta medida hace referencia al tamaño de los animales, la estructura física que deben tener que también es llamado fenotipo. Todo esto, buscando que tenga las actitudes idóneas para que no sufra en el entorno donde se maneja y trabaje mejor. (Lea: Lo primero que se debe hacer al iniciar un programa de mejoramiento genético)

El experto señala que con esta selección debemos tener claro “cuáles animales me trabajan en las condiciones que le estoy ofreciendo, cómo debe ser su cruce, su peso, tamaño, de tal forma que funcione mejor. Una de las opciones que tenemos para esta selección es la investigación por medio de un recorrido por las fincas de los vecinos y así analizar qué les está funcionando mejor”, comenta Coutiño Torres.

De acuerdo al profesional, para llevar este análisis de forma más organizada, el productor debe documentar la información de los animales, el tiempo al primer parto teniendo en cuenta las condiciones en las que se encuentra, así como el periodo hasta sus siguientes partos. Según Coutino Torres, el intervalo entre partos va determinar qué tipo de animal es el que se tiene en el predio.

En el proceso de selección por biotipo y aptitud funcional, es importante tener en cuenta la fertilidad, pues se puede tener la vaca con un buen potencial genético, pero si no pare, no va a funcionar en el negocio, por lo tanto la búsqueda debe estar enfocada en vacas fértiles, ya sea para leche, carne o doble propósito. (Lea: ¿Cumple usted con esta lista de requisitos para iniciar un programa de mejoramiento genético?)

“Necesitamos que nuestras vacas paran al menos una vez al año, se puede abrir entre 12 o 14 meses, pero no más de ahí. He encontrado que en promedio en el trópico se están presentando intervalos entre 22 y 24 meses lo que quiere decir que estamos seleccionando mal”, asegura Coutiño Torres.

La sanidad también juega un papel clave en el proceso de selección, pues va a depender mucho del biotipo y la aptitud que tenga el animal para trabajar. El productor siempre debe evaluar qué tan sano y resistente es al medio, teniendo presente que debe ir acompañado de un buen programa de vacunación.

En palabras de Coutiño Torres, este proceso debe ir de la mano de la “nutrición que tiene que mucha importancia, porque en selección se debe tener claro que tipo de nutrición le brindaré a los animales porque no es la misma que le va a poder dar mi vecino. Además esto también va de la mano del tipo de producción que llevo”, explica.

Por lo tanto, el experto expresa que el productor debe plantearme cómo va a alimentar a sus animales para que así pueda seleccionar, porque es con lo que va a trabajar. Son las circunstancias del predio las que dicen el animal que va a seleccionar, teniendo claro que este debe ser funcional.

Según Coutiño Torres, el manejo también hace parte del proceso porque “tiene que ver con las personas con las que se va a trabajar, pues como dueño debo tener claro si voy a estar al pie del corral o si voy a contratar personal. Es muy diferente la selección que va a tener un animal que está en constante contacto con las personas a un bovino que casi no estará interactuando con los humanos”, detalla. (Lea: ¿Sabe usted qué si y qué no en mejoramiento genético?)

Todo esto enfocado a que el temperamento de los animales cambia cuando se está en contacto directo con los humanos, pues muchas veces estos últimos son los encargados de ayudar en procesos como el parto.