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PorCONtexto ganadero-18 de Noviembre 2024
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Por - 08 de Marzo 2022
Una finca en La Guajira enfrenta la época de sequía con pasto de corte que ensilan, así como con suplementación con sales.
La sequía que se presenta durante varios meses en La Guajira dificulta la actividad ganadera, en especial por el tema de la alimentación de los animales.
Por eso en la Ganadería Nuevo Refugio, ubicada en el municipio de San Juan del Cesar, departamento de La Guajira, el administrador de empresas agropecuarias Guido Alfonso Verdecia Castilla, trabaja sobre la alimentación de los animales para aliviar el problema.
El tema del verano en esta parte es bastante complicado por la escasez de lluvias por lo que una de las estrategias empleadas es el uso del pasto de corte para alimentar al ganado.
Es así como en la finca se cuenta con siete hectáreas de este tipo de pasto que es de donde sale la ración diaria para cada animal. El sobrante se ensila durante todo el año, sin importar si hay lluvias o no para que en esos cuatro meses críticos de verano haya como alimentar los animales, indicó el profesional en una nota de La Finca de Hoy. (Lea: La ganadería y el cultivo de pasto de corte)
Los meses críticos de verano inician a final de año cuando no se presenta ninguna precipitación. En el caso de esta finca aunque en diciembre ya no hay lluvias todavía tienen pasto en los potreros y durante el primer trimestre de cada año, cuando no hay lluvias, los potreros se desmejoran mucho.
En abril —cuando empieza a llover— los pastos no se han recuperado y es como si continúan en verano porque no se tiene forraje para alimentar el ganado, por eso de diciembre a abril hay una gran crisis.
Para afrontar la falta de alimento se utiliza el silo sobrante del pasto de corte que se suministra a diario, además se brindan algunas sales minerales para contrarrestar la falta de proteínas que pierden los pastos por la sequía presentada.
Esta finca está en un cañón, al lado del río Cesar y las brisas que vienen del norte se encajonan y arremeten hacia esta zona y llegan hasta Valledupar pero allá hay unos cerros y antes de llegar mitiga esa brisa. Sin embargo, en el caso de ellos los vientos inciden en la calidad de vida del ganado y afecta su producción.
Por eso, a los animales que más se ven afectados por este fenómeno se les da un tratamiento diferente llevándolos a otra parte de la finca donde ventea menos. (Lea: Conozca cómo se siembra y fertilizan 5 especies de pasto de corte en Colombia)
En cuanto a la productividad lechera, es un tema que va de la mano con la reproducción de los bovinos pues de esto depende la cuantía de producto recogido.
Otra estrategia que tienen para afrontar el verano en esta finca es el sistema de riego que se utiliza y que permanece constante. Al estar cerca del río bombean hacia un jagüey o reservorio que tienen en la finca con capacidad de 150 mil litro de agua que es exactamente lo que necesitan para regar la finca.
Se saca del lixiviado de las lombrices 60 galones que se agregan para empezar a asperjar los potreros con lo cual al tiempo que se riega se está abonando y fertilizando, indicó.
Con estas estrategias, la Ganadería Nuevo Refugio ha logrado mantener unos animales sanos y sin que se reduzca de forma importante la producción en las épocas críticas de sequía.
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