Cómo han evolucionado y qué requieren las pruebas genómicas

La genómica es una herramienta que permite corroborar los resultados de la clasificación lineal de un animal, lo cual es clave para la toma de decisiones a futuro. Expertos aseguran que estos programas de selección genómica deben llevarse a cabo bajo ciertos criterios.

Humberto Guaquetá, médico veterinario PhD y especialista en reproducción bovina y salud de hato, indica que lo primero que necesita un programa de selección genómica es tener confiabilidad, pues se requiere una gran cantidad de datos que está relacionado con un alto número de ADN de muchos animales. (Lea: ¿Por qué deberíamos hacer nuestra propia selección genómica en ganadería?)

Este ADN, “puede ser de diferentes tipos de vacas dentro de la misma especie, con distintos tamaños, conformaciones, fenotipos. Entonces necesitamos una gran cantidad de esos genotipos para enriquecer la base de datos. Entre mayor cantidad de información tengamos en la base, los resultados que obtengamos de una prueba genómica van a tener mayor confiabilidad o repetibilidad”, asegura Guaquetá.

El otro requisito que menciona el experto es el control de calidad de la información, en Colombia tanto en otros países como Estados Unidos, existen personas que están trabajando de manera muy satisfactoria con las pruebas genómicas.

“Se toman los datos, se verifica la información de los ancestros del animal y además se toma una muestra de este para enviar al laboratorio”, menciona Guaquetá.

Continuando con los requerimientos, el profesional comenta que se necesitan unos métodos estadísticos para convertir los datos en predicciones, que es lo que resulta de la prueba del animal. (Lea: ¿Sabe cómo se aplica la genómica en la ganadería?)  

En palabras de Guaquetá, “se necesita que haya ganaderos convencidos que las predicciones van a funcionar, esto quiere decir personas que confíen en el programa, en lo que se ha venido demostrando y se hace cada vez más”.

Un punto clave en estas pruebas genómicas, es que requieren de inversión para continuar colectando y procesando datos, lo cual no solo es un monto económico, sino también una inversión en construcción de conocimientos.

Evolución de la genómica

Desde que arrancaron, las pruebas genómicas “han tenido un progreso en estabilidad y confiabilidad de las predicciones, pues en la medida en que se toman más muestras, la confiabilidad mejora”, expone Guaquetá.

Esto ha permitido que se aumente el número de variables probadas, es decir cada vez hay más rasgos disponibles, pues inicialmente solo estaban los tipos de conformación y producción, pero hoy por hoy se está trabajando con los rasgos de salud y longevidad de los bovinos.

“Además se ha visto un crecimiento en el número de animales genotipificados alrededor del mundo, lo que ha traído consigo un incremento en el progreso genético de cada una de las razas que han sido sometidas a este proceso”, concluye Guaquetá. (Lea: Genoma y clasificación lineal, cómo influyen en la genética ganadera)