Así puede mejorar la eficiencia reproductiva en su hato lechero

Tener en cuenta y cuidar la reproductividad debe ser uno de los objetivos que tenga todo tipo de productor, ya sea de leche, de carne, ceba o doble propósito. Conozca alguna de las consideraciones enfocadas en el ganado lechero.

Juan Pablo Aristizábal Aristizábal, médico veterinario y zootecnista, indica en una charla de Fedegán que “las consideraciones para mejorar la eficiencia reproductiva en ganado lechero son claves porque estos productores son mucho más cuidadosos, pero son similares con los de ceba”. (Lea: ¿Cómo corregir el déficit de eficiencia reproductiva y mejorar la fertilidad de las vacas?)

Mantener buen sistema de registros: Para el experto, esto debe hacerse teniendo en cuenta cada momento de calor de los animales, de tal manera que se tenga registrado cada detalle y cambio que se presente en el animal.

Servir a las novillas al peso recomendado para la raza: Hay que tener en cuenta que cada tipo de raza bovina tiene unos requerimientos que el productor debe conocer gracias a información que hay en los gremios y asociaciones de razas, para así poder brindarles a los animales las condiciones óptimas que necesitan.

Alimentar a las novillas correctamente: De acuerdo con el profesional, la idea es que los animales puedan servirse precozmente, “entre más rápido lleguemos al peso ideal más rápido las vamos a poder preñar”.

Observar los calores al menos dos veces al día: En palabras de Aristizábal, “esto se puede tornar práctico en una ganadería de leche, pero en una de cría se complicada un poco. Sin embargo los productores pueden implementar otros marcadores o modalidades para identificar celos rápidamente y tomar medidas de acuerdo al manejo que le estemos dando, ya sea monta natural, inseminación artificial o la combinación de ambos”. (Lea: Conozca las estrategias de manejo reproductivo integrado)

No servir las vacas antes de 50 días posparto: El profesional asegura que este es un punto importante porque se necesita optimizar la concepción al primer servicio.

“Debemos dar tiempo a ese útero mínimo de 50 días para que tenga una adecuada recuperación porque de lo contrario corremos el riesgo que el animal si entre al celo antes de 50 días, pero la implantación de ese embrión muy posiblemente fracase y eso se puede tornar en una reabsorción, lo que altera todos los procesos y hace que perdamos más tiempo con ese animal”, detalla.

Controlar las enfermedades reproductivas: La idea es que cada productor encuentre la forma que más se acomoda a sus condiciones, ya sea por medio de prevención o gracias a la vacunación.

Revisar rutinariamente a las vacas para diagnóstico de gestación: Es importante que los productores puedan de forma continua, hacer un control de los animales que quedan en gestación para así comenzar a implementar cuidados diferentes en estos animales.

Inseminar a las vacas en el momento correcto: Este procedimiento tiene unos días estipulados que el productor debe conocer para que la inversión se haga efectiva y no se lleguen a cometer errores que pueden costar mucho. (Lea: Reproducción: Cómo influye en la rentabilidad y cómo saber qué está fallando en el hato)

Finalmente, Aristizábal asegura que “con todas estas recomendaciones podríamos empezar a encontrar el camino para mejorar muchos de los parámetros reproductivos”.