Así es el modelo ganadero de Agrosavia

Desde hace 5 años, la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria viene implementando en sus centros de investigación sistemas bovinos productivos que están arrojando resultados imporantes. Replicar masivamente la información con los productores y exportar, las metas de su director ejecutivo.   Parece coincidencia, pero no lo es. La Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria, Agrosavia, desde hace 5 años dio un giro a su oferta ambiental de la ganadería tanto en carne como de leche, así como la de sus centros de investigación, eso los llevó a convertirse en ganaderos. (Lea: Agrosavia es el nuevo Corpoica)   Esa dinámica ha sido de mejora permanente, pues a pesar de adelantar investigaciones en la materia, no necesariamente se es buen productor. Eso lo entendió Juan Lucas Restrepo, director ejecutivo de Agrosavia y quien con orgullo lidera el proceso que viene dando frutos.   Los centros de investigación en las principales zonas ganaderas del país han facilitado el trabajo en materia bovina: Turipaná, en Córdoba; La Libertad, en el Piedemonte llanero; Carimagua, en la altillanura; y El Nus; nordeste antioqueño hacia Puerto Berrío.   "Nos costó un trabajo importante para alcanzar esa sostenibilidad financiera y ya en este momento nuestras ganaderías son demostrables, los modelos que se están implementando llaman la atención de muchos ganaderos en el país. Lo mismo ocurre con las publicaciones, días de campo y sistemas de extensión que están empezando a aprovechar los centros que son muy buenas vitrinas tecnológicas", argumentó Restrepo. (Lea: Conozca las nuevas tecnologías de Agrosavia para la región Caribe)   Agregó que es muy distinto investigar en ganadería y tener un enfoque de genética, nutrición o salud animal, a integrar todo eso como productor dentro de un modelo de trabajo que dé resultados.    Para Restrespo lo que se viene haciendo es sumar esfuerzos desde distintas disciplinas, pero con la capacidad de integrar todo ese conocimiento como productores y validarlo de manera que tengan la tranquilidad de que es transferible a otros ganaderos de zonas aledañas.   “Eso no lo hacíamos antes, los ganados eran compartidos que ponían privados en los centros, era un sistema totalmente distinto a realmente nosotros tener un capital o un patrimonio propio y corporativo, expresado en un número de cabezas bastante importantes, nuestras, que manejamos de una manera cada vez más certera, validando nuestro tema tecnológico”, expuso. (Lea: Estas son las propiedades de la nueva variedad de pasto Agrosavia sabanera)   Modelos en desarrollo   Cría en Carimagua: excelentes índices, con mejora de salud y alimentación de los animales. Los destetos son llevado al levante en la finca Taluma que queda en esa transición entre el Piedemonte y altillanura y los bovinos son terminados en La Libertad. Allí hay un ciclo completo de cría, levante y ceba que permite validar, para distintas etapas del proceso productivo, todos los temas tecnológicos.    El Nus: todo el tema de ladera es muy complejo y blanco de constantes críticas por cuenta del tema ambiental, allí se está implementando un modelo de pastoreo rotacional ordenado, en donde se está logrando la misma eficiencia que obtienen los ganaderos que implementan sistemas de rotación en tierras más planas.     Cesar: se está trabajando y ajustando todo lo relacionado con el silvopastoreo. (Lea: Socializan proyecto de Corpoica para aumentar producción en ceba)   Turipaná: el sistema de trabajo está basado en el uso de las nuevas variedades de guineas como es el caso de Agrosavia sabanera, que fue lanzada la semana anterior. Todas esas pasturas están siendo puestas a prueba con modelos intensivos, con una alta carga animal, lo que ha permitido obtener unos resultados importantes, a tal punto que se están logrando unos 200 kg de más carne al año, en comparación con el manejo de otras guineas del mercado con manejos equivalentes    Obonuco: allí se implementó un modelo de validación y ajuste de tecnología de Nueva Zelanda, se está llevando toda la genética –ya va en tercera generación– a Kiwi Cross, que es la utilizada por los ganaderos neozelandeses y se está armando un modelo de vacas en pastoreo, que caminan al ordeño y distancias largas, cuyo diseño de finca muy distinto a la lechería de trópico alto y que permite comprobar un modelo productivo.   Defensa de las razas criollas   De acuerdo con el director ejecutivo de Agrosavia, la entidad tiene un mandato muy importante: ser los custodios de salvaguardar las razas criollas colombianas. Por esa razón desde que hace 5 años montaron en las 4 razas principales unos núcleos de selección, que son de familias distintas a los animales que se usan estrictamente para conservar la diversidad genética. Ahí si se está trabajando con herramientas genómicas y haciendo presión en esos vientres y bovinos para obtener animales superiores. (Lea: Agrosavia desarrolló aditivo para aumentar producción de leche en vacas)   Eso ha permitido tener animales mejorantes que antes no existían en especies como Romosinuano, Blanco Orejinegro, Costeño con Cuernos y Sanmartinero (se viene trabajando núcleos de selección).    “Nuestro biotipo privilegiado para nuestras vitrinas y modelos ganaderos es trabajar con los cruces de los criollos. BON x Holstein o Romo x Brahman, ese tipo de biotipos se están estudiando, analizando y comparando contra otras razas que utilizan los productores –no solo en esa competencia cruda de cuántos kilos se obtienen al destete, en donde debemos se competitivos–, sino en el sistema y en el tiempo estos animales, incluyendo sus mejores tasas de preñez, cuánto y menores enfermedades, revisar cómo influyó ese comportamiento a la hora de hacer un balance económico más completo”, argumentó.    Exportación, una de las metas   Ante las ventajas que tiene Turipaná por ubicación, allí se viene estableciendo poco a poco –porque la inversión es costosa–, pero la idea es llegar a una finca dentro del centro de investigación a un modelo de carne para exportación, usando cruces con Brahman y Romosinuano, aprovechando la flexibilidad que se requiera en los biotipos animales. (Reportaje: El proyecto para instalar sistemas silvopastoriles a menor costo)   Además Agrosavia cuenta con investigadores en todo lo relacionado con carne en canal y demás, para acompañar toda la cadena de valor para poder evaluar, desde la calidad de la canal, para determinar los resultados de cara a ser exportadores de producto terminado.    “Sí, estamos empezando a incursionar en eso. Incluso creemos que en algún momento vamos a llegar a exportar genética, pero eso es un sueño a mediano plazo, porque todavía necesitamos unos ciclos adicionales del programa de mejoramiento genético para poder tener una serie de toros que produzcan un semen con un valor suficientemente interesante para que no sea la pajilla de criollo de $10 mil que es maravillosa, sino que empecemos a hablar de transferir un poder genético mucho más alto”, reconoció.    Metas a futuro   Restrepo no ocultó la presión internacional con la que convive la ganadería bovina por sus impactos ambientales, así como por la eficiencia energética para lograr una dosis de proteína frente a otras fuentes animales. (Lea: Altoandina: nueva variedad mejorada de avena forrajera)   Sin embargo cree que Colombia tiene que ser capaz de salir adelante en un escenario hostil para la carne bovina a futuro, lo cual debe lograrse a través de los modelos con los que está trabajando Agrosavia, ya que ellos están logrando unos indicadores ambientales ideales y mejores que los de las ganaderías de los países desarrollados que suplementan muchísimo en comparación con el país.   “Una ganadería con más bienestar animal, con pastoreo, en un modelo que debería ser el principal proveedor de carne a futuro en el mundo. Cuando la humanidad diga hay que bajarle a la proteína, debe primar la calidad, el sistema productivo y efectos ambientales, eso significa una materia prima colombiana que haya adoptado en buena medida nuestros modelos. Ese es un buen sueño”, remató.