5 retos para garantizar la permanencia de una asociación

Cuando los ganaderos deciden crear sus propias organizaciones, muchos desisten en el camino y la asociación termina sin haber comenzado. Por eso, es importante tener en cuenta estos 5 propósitos para que el gremio perdure en el tiempo.   El pasado 17 de enero de 2016, se llevó a cabo la asamblea de constitución de la Asociación de Ganaderos y Productores Agropecuarios del Bajo Magdalena, Asonagro, en la cual se nombró la junta directiva.   Alejandro Maestre Farfán, profesional en Gestión Productiva y Salud Animal del Fondo Nacional del Ganado, FNG, contó que hay 42 productores afiliados y que esperan que el número crezca. (Lea: Ganaderos de Plato se unen para formar nueva asociación)   “La idea es fortalecer a los pequeños y medianos ganaderos de la zona frente a la situación de verano, los insumos, los impuestos, entre otros. Es la única manera que tienen ellos para lograr ser competitivos”, declaró Maestre.   Sin embargo, confesó que en alguna época crearon una sociedad que no prosperó, y los productores se aislaron. Por este motivo, CONtexto ganadero presenta los 5 retos que tiene una asociación al momento de su creación.   Trazar objetivos claros   José Carlos Rodríguez Rivera, profesional extensionista en Plato, señaló que una asociación debe tener una misión y una visión precisas, de manera que los afiliados tengan conocimiento hacia dónde se dirigen y cuáles son los avances que se han hecho respecto al cumplimiento de dichos objetivos.   “Nuestra visión es que en 2025 Asonagro sea reconocida a nivel nacional. Como la constituimos en un tiempo definido, la finalidad es que concluya en 2050, pero será deber de nuestros hijos y nietos decidir si continúan con ella o no”, señaló.   Por su parte, Maestre comentó que hace un tiempo los productores crearon una asociación para participar en la convocatoria del Pacto Agrario, que nunca prosperó debido a que no obtuvieron los recursos de este programa.   “No sabemos qué pasó. El caso es la asociación no continuó, se desmotivó y dejaron de seguir funcionando. Mientras que con esta, estamos buscando el beneficio del ganadero, una asociación que sea sostenible y continúe en el tiempo”, aseguró.   Aplicación de tecnologías   Según Rodríguez, uno de los propósitos iniciales de la ganadería es la implementación de sistemas silvopastoriles, como las cercas vivas que cumplen 2 funciones específicas.   “Primero, para ayudar al ecosistema sembrando árboles, porque los productores han venido constantemente cortando árboles y degradando los terrenos. Y a la vez nos sirve para reducir costos a la hora de comprar madrinas”, declaró.   Naturalmente, una mayor cantidad de árboles permiten una suplementación alimenticia para el ganado. Especies como matarratón, guácimo, tótumo y leucanea pueden ser aprovechadas por los ganaderos en la implementación de cercas vivas.   Además de las cercas vivas, los campesinos asociados también pueden empezar a aplicar mejoramiento genético en sus fincas o elaboración de suplementos como silos, henos y bloques multinutricionales en épocas críticas.   Producción propia   Los campesinos de la zona han comprobado cómo los intermediarios que recolectan la leche y la transforman en productos lácteos son los que más se quedan con el dinero. Por eso, uno de los objetivos es adecuar un sitio donde se pueda acopiar el producido.   Maestre explicó que los ganaderos venden la leche a un precio muy bajo y dejan de percibir ganancias que podrían obtener si ellos mismos elaboraran el queso.   “La persona que hace el queso es la que en verdad hace la plata. Hace su queso y lo manda para Cali o para Medellín. El intermediario es el que realmente ve la plata. Esa persona le paga al ganadero la leche como le da la gana”, dijo.   Rodríguez coincidió con Maestre en que los ganaderos deberían buscar una forma de aprovechar el lácteo en lugar de venderlo todo. (Lea: ¿Cómo está el consumo de quesos en Colombia?)   “Como asociación de ganaderos, también tenemos que pensar en los productos derivados del lácteo, a ver si podemos agruparnos y montar nosotros la misma producción y distribución de estos, a raíz de que en la zona hay recolectores lácteos que pagan la leche a un precio y después a otro. Queremos que la asociación establezca los precios en la zona”, manifestó.   Legalización   Uno de los requisitos primordiales para formar una asociación es legalizarla ante la Cámara de Comercio. Esto se debe a que para su sostenimiento, los afiliados deben pagar una cuota mensual que debe ser consignada en una cuenta específica para tal fin.   Cuando se formaliza, los productores sienten la responsabilidad de continuar con el proyecto. El cumplimiento de este requisito y el registro de los aportes proporcionan mayor seriedad al gremio.   “Los 42 asociados están entusiamados porque ya estamos listos para hacer el registro ante la Cámara de Comercio, contamos con todos los papeles. Vamos a crear la cuenta para que la Cámara nos acepte todo eso”, contó Rodríguez.   Proyectos en común   “Hemos tenido reuniones con Unaga, con Asoganorte, para mirar en qué otros proyectos nos vamos a enfocar”, indicó el extensionista. (Lea: Asociatividad, un instrumento para el fortalecimiento de la ganadería)   En ese sentido, en lugar de proceder individualmente, los afiliados pueden actuar unidos para lograr un objetivo común. Como ejemplo, el profesional mencionó la posibilidad de adquirir una granja entre todos los asociados, con corrales establecidos, para hacer una producción conjunta.   De igual manera, Asonagro también tiene la idea de montar su propia página web como un medio de comunicación para hacerse conocer en la región y el país. Un medio en común para comunicar el sentir de una organización tiene mayor alcance que una sola voz que pretenda llegar a la opinión pública.   “Cuando una persona vende uno o 2 terneros, los vende a un precio. Cuando usted vende un lote, ya tiene otro valor. Estos son beneficios que obtienen los asociados y no los independientes”, expresó Rodríguez.