Estas son las dificultades de ofrecer lácteos light a bajo costo

Las marcas de lácteos lideran la tendencia light en el mercado nacional, pero su valor es un 30% más caro que el de los productos tradicionales, por lo cual su adquisición se concentra en los consumidores de estratos altos.

Una investigación de 2016 publicada en La República concluyó que las marcas de lácteos son “el común denominador” de la categoría light, con marcas como Colanta, Alquería, Alpina, Parmalat y Algarra que figuran como las que más venden.

El costo de elaborar este tipo de productos varía de acuerdo a los componentes que se vayan a remover o a agregar, como indicó Nelson Molano Cardona, gerente de Lácteos Pomar. (Lea: Industria local tiene el reto de vender lácteos light a bajo costo)

“El problema de las categorías light es que las han vendido muy caras. Para poder ser light en Colombia hay que tener plata, yo creo que es un tema de mercadeo porque hacerlo implica más costos, puede ser un poco más caro depende de lo que agregues, pero si le quitas, va a ser más barato”, sostuvo.

El empresario explicó que si se ofrece un producto sin azúcar, por ejemplo, será más económico porque no habrá que añadirla, al igual que sucede con la grasa que es más barato removerla. En cambio, si se adiciona proteína, el producto sí resultará más costoso.

Aun así, Molano señaló la importancia de implementar este tipo de productos porque ya no se trata únicamente de preservar la figura, sino de cuidar la salud frente a las grasas y los carbohidratos. (Lea: Esto es lo que usted no sabía de los alimentos 'light')

Por su parte, el economista Óscar Cubillos Pedraza destacó que estas marcas encontraron un mercado entre los estratos altos, porque son los más exigentes a la hora de elegir productos, por lo cual pueden pagar un precio hasta “3 y 4 veces más que el producto normal”.

“En Colombia, las personas no consumen mucha leche, y en los estratos altos, se inclinan más hacia los quesos madurados y menos hacia el líquido, que no gusta mucho. Pero si la ofrecen con un valor agregado y un componente light, puede que sí lo compren”, aseguró.

En efecto, un sondeo realizado con base en los precios de las tiendas Éxito, evidenció que la sustitución de productos tradicionales, por sus versiones light, genera un incremento en el valor del mercado desde 20% y hasta 40%.

De acuerdo con Cubillos, un aumento en el consumo de estos productos también podría explicar el incremento en las importaciones de leche descremada, que ya vienen sin grasa. (Crónica: Personas que trabajan elaborando productos con probióticos)

“En los últimos 2 años, lo que se ha importado más es leche descremada, que es más barata, y con eso se pueden fabricar productos más ligeros. Pero multiplican el precio, un negocio que sin duda genera mucha mayor rentabilidad”, indicó.

En todo caso, es claro que las empresas le están apuntando a elaborar alimentos que sean saludables y de eso es consciente el gerente de Lácteos Pomar: “Estamos pensando en ver cómo nos metemos en el tema de salud que hoy en día es una realidad”.

Sin embargo, también reconoce que eso no se hará en el corto plazo. “Es difícil decirle a una persona que vuelva a dieta light parte de la canasta porque no le da, entonces compra queso de vez en cuando o un yogurt, pero eso no es un hábito de vida”, remató.