Biocrastinación que es?
Foto: bbva.comLa biocrastinación es un término usado para describir la demora en tomar medidas frente a la pérdida de biodiversidad.

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¿Sabe qué es la biocrastinación y cuáles son sus consecuencias?

Por CONtexto ganadero - 23 de Febrero 2025

La biocrastinación es un término usado para describir la demora en tomar medidas frente a la pérdida de biodiversidad.

La pérdida de biodiversidad es un problema que afecta a todo el mundo, pero hay poca consciencia de su preservación. Conozca más sobre esta situación y qué se puede hacer.


El Foro Económico Mundial (WEF) publica anualmente el Informe de Riesgos Globales, que evalúa las amenazas más significativas para la economía mundial. En su edición de 2023, la pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas se destacaron como el cuarto riesgo más importante a largo plazo (10 años). Sin embargo, este mismo riesgo ocupa solo el puesto 18 en la lista de preocupaciones a corto plazo (dos años).

Esta discrepancia refleja una peligrosa tendencia: la subestimación de los riesgos inmediatos asociados con la pérdida de biodiversidad. Esta actitud de posponer la acción, especialmente en el contexto de la biodiversidad es lo que se denomina ‘biocrastinación’, según un informe del BBVA.

La biocrastinación es un término que describe la demora en tomar medidas significativas para abordar la pérdida de biodiversidad. A pesar de las claras señales de alarma, este problema no se ha priorizado como una amenaza inmediata. Esto se debe fundamentalmente a la percepción de que los impactos de la pérdida de biodiversidad se sentirán en el futuro lejano, y no en el presente.

Este fenómeno se ve agravado por una falta de reconocimiento de la interdependencia entre la biodiversidad y otros riesgos globales. Por ejemplo, la crisis climática, la escasez de recursos naturales y la inseguridad alimentaria están intrínsecamente vinculadas a la salud de nuestros ecosistemas. Ignorar estas conexiones exacerba otros problemas globales, señala el informe. (Lea en CONtexto ganadero: Conozca 4 agentes de conservación de biodiversidad en fincas con SSP)

La biodiversidad, la variabilidad de la vida en todas sus formas, es esencial para el funcionamiento de los ecosistemas y para la supervivencia humana. Sin embargo, la pérdida de biodiversidad ha aumentado a un ritmo alarmante en las últimas décadas.

Según el informe Planeta Vivo 2022, del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), las poblaciones de vertebrados han disminuido un 69 % en promedio desde 1970. América Latina y las regiones de agua dulce son las más afectadas, con caídas del 94 % y 83 %, respectivamente. La extinción de especies puede desencadenar efectos en cadena que desestabilizan ecosistemas enteros, afectando los servicios ecosistémicos de los que dependemos, como la polinización de cultivos, la regulación del clima y la purificación del agua.


Indicadores


Para conocer la magnitud de la crisis de biodiversidad se tienen diferentes indicadores. Por ejemplo, hay uno que se denomina Índice Planeta Vivo, desarrollado por el WWF, rastrea las tendencias de las poblaciones de vertebrados.

Otro, es el Índice de Hábitat de Especies, que monitorea los cambios en la calidad, tamaño y conectividad de los hábitats de las especies. Desde 2001, más de 150 países han experimentado una disminución en la calidad de los hábitats. (Lea en CONtexto ganadero: Conservación de la biodiversidad, una opción adicional de ingresos)

Existe uno más que se denomina Abundancia Media de Especies y mide la integridad de la biodiversidad local. Valores bajos indican una significativa pérdida de biodiversidad, lo que tiene repercusiones directas en la estabilidad de los ecosistemas.

Uno de los principales desafíos en la lucha contra la pérdida de biodiversidad es la percepción de la responsabilidad. Solo el 10 % de los encuestados en el Informe de Riesgos Globales del WEF cree que la gestión de los riesgos de biodiversidad es efectiva. La mayoría considera que la responsabilidad recae en los gobiernos y las organizaciones internacionales, no en las empresas, según el reporte del BBVA.

Sin embargo, el tejido empresarial juega un papel crucial que desempeñar. La actividad de las empresas puede tener impactos directos e indirectos significativos en los ecosistemas. Desde la deforestación para la agricultura hasta la contaminación industrial, las acciones corporativas pueden contribuir a la pérdida de biodiversidad o ayudar a mitigarla.

Concluye señalando que para combatir la biocrastinación, se necesita un cambio de paradigma. Los líderes empresariales y políticos deben reconocer la biodiversidad como una prioridad urgente y actuar en consecuencia.