Nuevos fertilizantes podrían reducir huella de carbono de la agricultura

A propósito del Día Mundial de los Fertilizantes que se celebra este domingo 13 de octubre, la multinacional noruega Yara hace un llamado para impulsar la producción de alimentos baja en emisiones con una agricultura moderna e insumos menos contaminantes.

Esta fecha ha sido elegida porque coincide con el 111 aniversario de la patente de Haber-Bosch, proceso tecnológico para sintetizar el amoniaco y que permite producir fertilizantes a partir del nitrógeno atmosférico, entre otros usos. Este nombre se refiere a los investigadores Fritz Haber y Carl Bosch, que recibieron el premio Nobel de Química en 1918 y 1931, respectivamente.

De acuerdo con la firma Yara, para enfrentar al crecimiento demográfico mundial, la agricultura debe ser eficiente y producir más alimentos, sin aumentar la superficie de tierra cultivable. (Lea: Yara y ENGIE trabajarán para producir fertilizantes “verdes”)

Chrystel Monthean, Business Unit manager de Yara para Latinoamérica, sostuvo que el primer paso para lograr una agricultura baja en emisiones es no cambiar el uso del suelo, manteniendo los depósitos de carbono como los bosques, porque preservan la biodiversidad.

“El segundo es impulsar la adopción de mejores prácticas en el uso de los fertilizantes minerales; aplicar fuentes de nitrógeno más eficientes, tales como los nitratos, que permiten aumentar el rendimiento en cosecha y reducen el impacto medioambiental”, añadió.

En el Día Mundial de los Fertilizantes, la multinacional hace un llamado a los gremios, la agroindustria y el gobierno para cambiar las prácticas agrícolas tradicionales y así mitigar este impacto. (Lea: ¿Por qué es tan importante reponer los nutrientes de los suelos?)

En ese sentido, el sector debe implementar nuevas tecnologías de nutrición vegetal, como fertilizantes de última generación que se fabrican con baja huella de carbono y con fuentes de nitrógeno más eficiente, con lo cual contaminan menos el aire y mitigan el cambio climático.

Miguel Amado, gerente de Agronomía de Yara Colombia, explicó que en algunas etapas de su ciclo de vida, los fertilizantes emiten gases de efecto invernadero (GEI), tales como CO2 (dióxido de carbono) y N2O (óxido nitroso). (Lea: ¿Aplica usted las buenas prácticas de fertilización?)

“(Pero estos) también estimulan la captación de CO2 por parte de las plantas y, al impulsar mayores producciones de alimento por unidad de tierra arable, ayudan a prevenir la deforestación y evitan cambios en el uso del suelo”, explicó.

Finalmente, Marcelo Altieri, director regional para el Cono Norte de Yara, sostuvo que la firma noruega incentiva a Colombia a sustituir los insumos convencionales como urea, sulfato de amonio y cloruro de potasio, por tecnologías más sustentables como fertilizantes a base de nitratos.

“Los nitratos son la fuente preferida por las plantas y ofrecen grandes beneficios para el agricultor. Por eso, invitamos a las asociaciones de productores, las autoridades y la industria de alimentos, a repensar sus planes de fertilización y trabajar con Yara para reducir su huella de carbono, alimentar el mundo de manera responsable y proteger el planeta”, concluyó.