Colombia también le apuesta al mejoramiento genético de porcinos

Razas como Landrace, Large White, Newsham, Hypor, Topigs y Pietrain, son algunas de las que se consiguen en las diversas casas comerciales que hay en el mercado. El  trabajo que adelantan los productores en la materia ha permitido que haya más uniformidad en materia productiva.   Así como ocurre en el sector bovino, los productores porcinos vienen haciendo un esfuerzo importante por mejorar la genética de los animales que hay en el país. Por esa razón han optado por adquirir material de alta calidad proveniente de Europa con el objetivo de producir lechones con una mejor carne, más sabor y menos grasa.   En Colombia hay 4 casas comerciales que manejan e 84 % de la genética que se comercializa y con la que se está fomentando una mejor producción de animales. Dichas compañías tienen líneas maternas o paternas, por lo que ya depende de la necesidad del empresario la elección que haga. (Lea: Con mejoramiento genético porcino se busca aumentar partos al año)   Landrace, Large White, Newsham, Hypor, Topigs, y Pietrain, son las variedades de porcinos escogidas por los productores para adelantar el mejoramiento genético, según expuso Rodrigo Londoño, propietario de algunas explotaciones en Antioquia y el Eje Cafetero, quien reconoció el esfuerzo que están haciendo los porcicultores por satisfacer las necesidades del mercado.   Añadió que el mundo le está apuntando en materia de cerdos a 2 razas en especial: Duroc y Pietrain. La primera ofrece animales con una carne más roja y de mejor sabor, mientras que la segunda brinda un producto más blanco y bajo en grasa. (Lea: Cerdos para mejoramiento genético podrán importarse desde Dinamarca)   “Colombia ha logrado una muy buena penetración de genética en la producción porcina. El país tiene alrededor de 200 mil hembras y cerca de 150 mil tienen una herencia definida. Actualmente hay una población cercana a los 30 mil animales que tiene un origen mixto, pero el propósito del sector es apostarle a la uniformidad”, indicó Londoño.   Sin embargo, los productores no son los únicos que están trabajando en el mejoramiento genético, las universidades también están buscando que sus estudiantes no solo conozcan el proceso, sino que vean las notables diferencias y propósitos que tiene cada una de las razas.   En la granja experimental de la Universidad Paula Santander Ocaña, se adelantó un importante trabajo con 4 hembras de la variedad SuperMon 52, lo cual permitió obtener una camada de 40 lechones con pesos entre los 1.5 y 1.7 kilos (Lea: Las claves para triunfar en la industria porcina)   “Esta es una línea con una muy buena genética, eso permite que nazca un mayor número de crías con pesos más altos que los usuales. Unas cerdas primerizas pueden tener en su primer parto máximo 10 lechones con pesos que no superan los 1.2 kilos, pero en este caso los resultados fueron muy satisfactorios”, destacó Carlos Daniel Peinado Pacheco, coordinador del Proyecto Porcino de la institución educativa.   Otra de las razones para que en el país haya un crecimiento en el consumo de carne de cerdo es la homogeneidad en cuanto a razas, ya que si el comensal quiere una pierna, un lomo o el corte que desee, le va a saber igual porque hacia allá está migrando el mercado. Eso genera confianza y seguridad entre la clientela.