El glifosato de vuelta
El presidente Duque anunció la reanudación de aspersión con glifosato y, sin demora, la presidente de la Corte Constitucional le “recordó” que las condiciones de 2017 continuaban vigentes; y ante el pedido de flexibilizarlas, respondió tajante que estaban escritas en la sentencia, como quien dice, que “lo escrito, escrito está”, para que el Gobierno no se haga ilusiones en la revisión de la sentencia de tutela que las impuso.
ONU: nuestra dignidad ultrajada
La señora Agnès Callamard, Relatora Especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, sin pasar por el país ni esperar las respuestas del Gobierno a su cuestionario; es decir, a control remoto, desde Suiza y, seguramente, por información de prensa o –me atrevo a suponer– por el lobby de la izquierda internacional o las denuncias de HRW del señor Vivanco, decidió hacer graves acusaciones al gobierno colombiano, que no dudo en calificar de ultraje injustificado a la dignidad nacional.
¿Por qué el narcotráfico?
El objetivo de la izquierda internacional ha sido tomarse el poder para instaurar regímenes comunistas. A finales de los cincuenta, desde la Cuba castrista, la consigna era lograrlo por las armas en Latinoamérica. De allí nacieron, en los sesenta, las Farc y demás guerrillas que asolaron al continente bajo las consignas y estrategias del “foquismo”, personificado en el Che Guevara, dado de baja en los Andes bolivianos.
Siempre el narcotráfico
Si un gerente insta a sus vendedores a hacer “su mejor esfuerzo” para doblar las ventas, espera que visiten más clientes y revisen estrategias; no que ataquen competidores ni sobornen encargados de compras. Cuando le decimos a un hijo que haga lo necesario para salvar su año, esperamos que sacrifique diversiones y estudie; no que amenace al maestro o haga trampa en los exámenes.
¡Álvaro!
En la historia universal, la referencia a “Leonardo”, a secas, nos lleva al portento de Vinci, en los extramuros de Florencia, al hombre del renacimiento, al polímata…, al sabio. En nuestra historia, una alusión a “Álvaro”, a secas, nos remite sin atajos al mártir del 2 de noviembre de 1995; Álvaro Gómez Hurtado, uno de esos seres “enciclopédicos”, excepcionales, que brotan de tiempo en tiempo para iluminar la penumbra de la cotidianeidad humana.
¡Se puede!
La hermosa alcancía metálica de “La Caja Agraria”, que fuera símbolo del ahorro en Colombia, hace parte de mis recuerdos de infancia. “La Caja”, una entidad querida por los colombianos, en buena hora perdió sus apellidos de “Industrial y Minera” para concentrarse en el sector agropecuario, pero en mala hora se ganó un lugar en la narrativa de la corrupción en Colombia, hasta su liquidación en 1999.
El paro nacional
Me pregunto cuántas personas, entre los miles que salieron a marchar el 25 de abril, habrán leído el proyecto del Plan de Desarrollo y, entonces, se sienten justificados para protestar en su contra.
Minga extorsiva, politizada y violenta
"El mensaje que el presidente mandó es que no vendría mientras la vía permanezca cerrada, pero los que estamos movilizados hemos planteado que no se puede despejar la vía hasta que el presidente venga". Si esto no es un chantaje violento al Gobierno, entonces ¿qué es? Y como si fuera poco el caos generado en el suroccidente del país, el arrogante líder de la minga amplía su amenaza: "Frente a lo dicho por el Presidente, que no viene, se fortalece la minga a nivel nacional (…) para que todas las regiones se levanten…”.
Debate torticero
El de las objeciones es un debate torticero, porque, sencillamente, una cosa es la constitucionalidad y otra la conveniencia; un debate polarizador para revivir la falsa división entre amigos y enemigos de la paz; un debate perverso que, apelando a la presunta destrucción del Acuerdo –una mentira– y un eventual regreso a la guerra –un chantaje–, busca preservar la impunidad negociada por Santos.
La corta y truculenta vida de la JEP
Una justicia transicional para la reinserción de las Farc era legítima, pero no el esperpento de “justicia especial” que socavó las instituciones, permitió impunidad para décadas de crímenes de lesa humanidad y, de contera, en su corta vida se tiño de mentira y escándalo. Breve historia: